TELEVISIÓN

Sánchez Feijóo, el debate menos visto de la historia

A pesar de ser lo más visto del día y de poder presumir de convertirse en la la emisión no deportiva más vista de la temporada, el debate sedujo a una media de 5.911.000 espectadores, de manera que obtuvo un 46,5%% de cuota de pantalla.

Debate Sánchez Feijóo

AtresmediaSánchez y Feijóo, en un momento del debate.

Sin duda ha sido el debate menos visto de la historia. El cara a cara entre Sánchez y Feijóo sedujo a una media de 5.911.000 espectadores, de manera que obtuvo un 46,5%% de cuota de pantalla. A pesar de todo, las cifras son apabullantes y lógicamente fue el programa líder en su franja y, como es lógico la emisión no deportiva más vista de la temporada.

Sin duda, las cifras del único debate de toda la campaña son consecuencia de la bajada del consumo televisivo en verano, a las que hay que añadir la espantada de espectadores que produjo un debate bronco en el que los moderadores no desmontaron las mentiras de los candidatos en directo, pocas veces repreguntaron y que permanecieron presentes en el plató en calidad de convidados de piedra. Un debate en el que Feijóo comenzó comiéndose al presidente y Sánchez, como en su día hizo González con Aznar, subestimó a su adversario. Sánchez estuvo mal, Feijóo gano la contienda, pero tampoco es que brillara por su soltura. Si alguien ha perdido en este debate ha sido el periodismo y la ciudadanía.

Debate simultáneo

Dejemos el análisis a los politólogos y regresemos a los datos ofrecidos por Barlovento Comunicación. El debate entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo se emitió de forma simultánea en Antena 3 La Sexta. Por canales, obtuvo en La Sexta una media de 2.700.000 espectadores, lo que otorgó a la cadena verde una cuota de pantalla del 21,4%; en Antena 3 los candidatos congregaron a 3.200.000 de espectadores, una cifra que supuso 25,1% de share.

Así las cosas, el debate pasará a la historia por ser el menos visto, se queda a años luz del anterior debate celebrado hace siete años, en 2015, cuando el cara a cara de Sánchez y Mariano Rajoy logró una audiencia media de 9.728.000 espectadores y una cuota de pantalla del 48,7%. Para ser justos, ese debate se emitió en 20 canales de forma simultánea.

Los jóvenes, los más interesados en el debate

El debate fue visto por un 50,3% de hombres frente al 43,2% de mujeres. Si algo llama la atención son los resultados por las franjas de edad. Según se desprende de los datos de Barlovento, un 48% de los jóvenes entre 13 a 24 años estuvieron atentos al debate y un 48,7% de los mayores de 64, también. Son las dos franjas con más audiencia. Lo que corrobora las teorías de algunos analistas que afirman que la batalla se libra en estas dos franjas que son las que más peso tendrán en las elecciones del 23J.

El minuto de oro se produjo a las 22.45 horas cuando coincidieron frente al televisor 6.400.000 de espectadores, un 47,8% de cuota de pantalla. Instante que coincidió con una de las miles de veces que Feijóo insistió en la cantinela de llegar a un acuerdo para que vote la lista más votada. Cosa que no ha ocurrido en Extremadura.

Poca tradición de debates

Lamentablemente, en España tenemos muy poca tradición respecto a los debates. Un debate puede seducir a alguien que no está en el día a día de la política y que en ese momento se enchufa a la televisión. Podría movilizar a los indecisos, pero el de ayer sin duda no se organizó pensando en ellos, de manera que solo servirá a los parroquianos de cada bloque. Fue un fracaso si su fin era conseguir movilizar al electorado que no está atento a la agenda política y es el que puede resultar decisivo en estas elecciones.

Respecto a la historia, el primer cara a cara entre Aznar y González se celebró en 1993 y fue un debate a dos tandas. La primera, el 24 de mayo, obtuvo un 61,8% de cuota de pantalla y 9.625.000 espectador; la segunda, una semana después, llegó hasta el 61,8 de share y 10.526.000 espectadores.

El último debate se celebró el 4 de noviembre de 2019, donde Pablo Iglesias por Podemos, Albert Rivera por Ciudadanos, Santiago Abascal por Vox, Pablo Casado como candidato del PP y Pedro Sánchez también candidato del PSOE. Hasta el de 10 de julio, este era el debate con peor audiencia de la historia. Y eso que sentó frente al televisor a 8.8632.000 espectadores.