7 maneras de incentivar la alimentación saludable con niños

Alimentación saludable niños

Alimentación saludable niños

Alimentación saludable niños

Comer sano es muy importante para los niños. Además de tener beneficios a corto plazo para la salud, enseñarles a comer sano desde pequeños les ayudará a tener buena relación con la comida, previniendo la obesidad a largo plazo.
Eso sí, no todo el mundo sabe hacerlo, así que vamos a ver algunos consejos que deberías seguir para fomentar la alimentación saludable en tus hijos. ¡No te los puedes perder!

Las 7 formas de incentivar la alimentación saludable en niños

En concreto, tenemos 7 consejos para ti, los cuales te ayudarán a que coman mejor. Además de seguir estos consejos, deberías fomentar la práctica deportiva y no ver la comida como un premio, evitando al máximo los procesados.

Comer sin prisas

La masticación correcta es clave para el desarrollo y para la saciedad, así que nunca deberías incentivar la prisa en los niños. Esto incluye el desayuno, la comida y todas las veces que se consuman alimentos durante el día.
Los niños deberían comer tranquilos, de forma saludable y con control, algo que les ayudará a tener una relación más sana con la comida a largo plazo. Por las mañanas es mejor levantarse un poco antes y desayunar tranquilos que apostar por alimentos procesados rápidos y por las prisas.

Predicar con el ejemplo para que se autogestionen

Los niños nos imitan, tanto para lo bueno como para lo malo. Por ello, deberíamos limitar nosotros mismos el consumo de dulces y procesados, para que ellos vean que lo bueno es comer sano.
Además, evita los atracones y las conductas compulsivas, algo que hará que ellos las eviten. Facilita el acceso a la comida sana, comprando fruta y verdura fresca y poniéndosela a su alcance. Al final, serán ellos los que elijan esas opciones sanas.

No les obligues a comer

Muchos padres cometen el error de obligar a comer a los hijos, pero esto no es sano. Algunos niños comen más que otros y a veces tienen rachas de inapetencia.
Es más, obligarlos a comer puede ser contraproducente, ya que podrían acostumbrarse a comer el plato entero incluso cuando están satisfechos. Lo mismo ocurre cuando se les obliga a comer alimentos sanos sin que hayan desarrollado el gusto por ello, causando el efecto contrario al que buscas.

Explícales por qué deben comer sano

Cuando eres niño, te resulta difícil entender por qué hay que comer sano, ya que lo que más nos gustan son los dulces. Por este motivo, deberías explicarles por qué deben hacerlo, contándoles los beneficios y lo que les pasará si comen azúcar.
Por ejemplo, puedes llevarlos al supermercado para que conozcan cómo son los alimentos. Eso sí, deberías mantenerlos lo más lejos posible de los alimentos ultraprocesados, dejándolos solamente para ocasiones especiales y con moderación. Estos alimentos tienen mucha grasa y mucho azúcar, alimentos malos en exceso.

La variedad es la clave, pero sin olvidar lo básico

Los niños deben comer variado para no aburrirse, así que apuesta por meter alimentos nuevos con bastante frecuencia. Eso sí, no debes perder de vista lo básico
Lo básico es comer más fruta y verdura, con un desayuno con grasas saludables y carbohidratos integrales de liberación lenta. El resto de comidas deben tener un aporte equilibrado de proteínas, carbohidratos y grasas saludables para un correcto desarrollo, estando presentes todos los nutrientes.

Cocinar con ellos

Si te cuesta mucho que los niños coman, prueba a cocinar con ellos el menú del día. Al principio, pueden hacer pequeñas tareas, como echar las especias o remover, para hacer tareas más complejas según vayan cumpliendo años.
Al participar en el plato, lo querrán probar sin ninguna duda para ver cómo les ha quedado. Además, pasarás tiempo de calidad en familia y enseñarás a tu hijo a ser independiente desde muy pequeño.

Comer en familia y sin pantallas

Comer en familia es una costumbre que se está perdiendo, pero ayuda a comunicarse y a tener tiempo en familia. Eso sí, comer en familia no es discutir, así que evita siempre la hostilidad.
Además, comer frente a una pantalla no es positivo. Eso es porque se tiende a comer sin saborear la comida, algo que puede derivar en trastornos alimenticios. De nuevo, es importante predicar con el ejemplo y ser nosotros los primeros que comemos sin pantallas.