4 trucos para explorar con niños sus aficiones

Aficiones de los niños

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Aficiones de los niños
Descubrir nuevas aficiones es una aventura de la que los seres humanos disfrutamos durante toda la vida, pero muy especialmente en la infancia. En cada etapa tenemos la posibilidad de practicar actividades que encajan con nuestros gustos, preferencias e intereses. En el caso de los niños, debemos prestarles todo nuestro apoyo para que identifiquen nuevas posibilidades de entrenamiento y ocio. No se trata de imponerles ninguna actividad, sino de darles las herramientas que necesitan para descubrir por sí mismos qué es lo que les gusta.

Recursos y herramientas

Actualmente, tenemos un mundo de posibilidades para ofrecerles a nuestros hijos recursos para explorar el mundo. Debemos hacer todo lo que está en nuestra mano para pasar tiempo de calidad con ellos y hacer diferentes actividades.
Por ejemplo, la visita a la biblioteca un fin de semana puede despertar en los niños su interés por la lectura. La lectura tiene grandes beneficios en el desarrollo de los más pequeños ya que ejercita el cerebro, fomenta el interés por conocer el mundo, mejora la concentración y desarrolla la creatividad y la imaginación.
También podemos dar un paseo por la naturaleza y darles una cámara de fotos. La fotografía es muy beneficiosa para los niños porque les ayuda a fijarse más en los detalles, les permite dejar volar su imaginación y creatividad y les enseña a ser más pacientes.
Por supuesto, no es imprescindible salir al exterior para que los niños exploren con sus aficiones. En casa, una tarde de manualidades es fantástica para que desarrollen su capacidad creativa, de concentración y expresión. Las manualidades son una actividad muy relajante y que además desarrollan las capacidades de destreza fina y motoras.

Escucha activa

Uno de los principales consejos para ayudar a nuestros hijos a explorar con sus aficiones es el de poner en práctica la escucha activa. Se trata de escuchar y entender lo que dicen los niños no desde nuestro punto de vista, sino desde el suyo. Más allá de las palabras, debemos ser capaces de interpretar sus pensamientos, emociones y pensamientos.
También debemos tener en cuenta que los niños pueden cambiar de opinión respecto a una iniciativa concreta en cuestión de días. El hecho de que durante el fin de semana hayan disfrutado de la fotografía no significa que este vaya a ser su hobbie favorito a lo largo de la vida.

Interés por las aficiones

Para los niños, sus padres son el modelo a seguir en la vida. Por lo tanto, nuestros hijos difícilmente van a desarrollar algún interés por la lectura si nosotros no leemos. A través de nuestra experiencia y motivación, podemos acompañarles en el aprendizaje de una actividad que les haga conectar con sus ilusiones. Ahora bien, si no muestran el mismo interés que nosotros tenemos no pasa absolutamente nada.
A través de la lectura, el cine infantil, la música, el arte y otras disciplinas, los más pequeños poco a poco se van introduciendo en un universo lleno de posibilidades.

Fechas señaladas

Podemos aprovechar el contexto estacional para disfrutar de unas actividades u otras según la época del año. Además, en fechas señaladas podemos proponer a nuestros hijos diferentes actividades según sus propios gustos. Si por ejemplo son unos apasionados del dibujo y las manualidades, con motivo de San Valentín pueden hacer unos corazones con cartulinas y colgarlos a modo de guirnalda en el salín.
Lo más importante es que seamos capaces de interesarnos por los gustos de los niños y compartirlos con ellos. Esto va a hacer que los más pequeños vean que no están solos y que pueden compartir con sus padres lo que verdaderamente les gusta.
Para los niños, tener aficiones tiene grandes beneficios. Reduce el estrés ya que gracias a los hobbies no se aburren, lo cual es un gran punto a favor. Además, pueden descubrir talentos desconocidos, para la música o el dibujo, por ejemplo. A esto hay que sumar que el sentirse realizados y participando en aquello que les gusta aumenta su autoestima. Y, por último, cabe señalar que al estar participando en una actividad que les gusta, los niños ponen sus sentidos en esta práctica. Esto mejora su capacidad de concentración para el futuro.