El desayuno es simétrico
Adoro desayunar. Y no porque me levanto casi siempre con un hambre de lobo –que también– sino porque me encanta desprenderme de la noche metiendo la nariz en una taza de café, me encanta el crunch crunch de la tostas en los oídos y esa mezcla bendita entre la mantequilla y la mermelada que quien […]