Xavi ya está en la picota

Alves Xavi Hernández.

EUROPA PRESSXavi Hernández.

Las maletas con ruedas son parte importantísima del ajuar personal de los entrenadores de fútbol. Al menos, siempre se les ha adjudicado tal complemento para su constante viajera. Los resultados adversos son condena casi inmediata. Le ocurrió a Quique Setién en el Villarreal y su sustituto en el banquillo, Pacheta, se sospecha que ayer tenía la valija preparada. Ganar le salvó del despido. Que estas situaciones ocurran en clubes desde  la zona media hacia abajo no sorprenden porque son frecuentes y se dan varias veces todas las temporada. Lo que resuelta menos habitual es que se pongan en la picota técnicos de clubes de primer orden como Xavi en el Barcelona. Antes de su llegada ya circularon teorías sobre su aptitud para un equipo con tanto historial y tanta necesidad de ganar títulos. Llegó de entrenar en Arabia Saudí lo que no era excelente carta de presentación. En la temporada pasada en Liga estuvo a la altura de lo que se le pedía aunque en Europa no dio la talla. Este año las circunstancias son muy distintas. Ya se han volcado sobre él todas las dudas que hasta ahora no habían sido proclamadas.

No están gustando las alineaciones, ni los métodos futbolísticos que practica el conjunto. Se han tapado algunos de los que pudieron ser casi dramas con la aparición de jovencitos que marcaron goles cuando más lo necesitaban. Las apariciones de Yamine Lamal, Fermin y Guiu en momentos precisos le salvaron los muebles. Las presencias de los futbolistas en formación fue, en ocasiones, la coartada. Si se perdía se consideraba que había  justificación. Las lesiones de De Jong, importantísima, la de Pedri que todavía no está en su puesta a punto total, más otras circunstanciales como Araujo, Lewandowski y Sergi Roberto son bajas sensibles. Pero ello no justifica plenamente que el juego que practica no sea ni chicha ni limoná.

El Barça no juega como cuando Xavi formaba parte del equipo mejor de la historita barcelonista y tampoco busca las victorias con rapidez, verticalidad y  tensión. Prueba de ello fueron las manifestaciones de Gundogan, que no gustaron, porque denunció la falta de más ímpetu durante el juego.

Xavi se ha especializado en buscar excusas con las que intenta difuminar la auténtica realidad. Y ya no cuelan.

Posdata. En Larnaca (Chipre) donde jugaron Maccabi de Haifa y Villarrreal (1-2), se guardó un minuto de silencio por las víctimas israelíes. Dos jugadores del Villarreal, Mandi y Akhomach, musulmanes, no estuvieron en la fila del centro del campo. El Villarreal hizo saber al club israelí y a la UEFA, que ellos guardarían el minuto de silencio por todas las víctimas inocentes del conflicto.

Sobre el autor de esta publicación

Julián García Candau

Nació en Vila-real (Castelló). Periodista.

Fue jefe de Deportes de “Ya”. Jefe de Deportes, Redactor Jefe y cronista parlamentario de “El País”. Director de Deportes de Televisión Española. Director de Deportes de la Agencia EFE. Director del diario “AS”. En la actualidad es colaborador de “Levante”.

Libros: “Santana”, “El fútbol sin ley”, “Historia de los Mundiales”, “Madrid-Barça- Historia de un desamor”, “La moral del Alcoyano”, “Bernabéu, el presidente”, “Celos, amor y muerte. Tragedias y pasiones del toreo” y “El deporte en la Guerra Civil”. Este libro el 26 de abril de 2008, el Premio de la Crítica en Valencia.

Ha colaborado en la Enciclopedia Espasa y en varios libros de diversos autores, entre ellos, “Historia de los espectáculos en España” y “Periodismo especializado”. En la actualidad es el único periodista en activo que informó de la victoria de la selección española de fútbol en la Copa de Europa en 1964. Posteriormente, asistió a las de 1968, 1980 y 2004.

Ha sido cronista de partidos de la selección española de fútbol desde 1963. Es el periodista deportivo que más crónicas ha dedicado al equipo nacional.

Ha sido enviado especial en campeonatos del Mundo de Alemania-74, Argentina-78, España-82, México-86, Italia-90, Estados Unidos-94, Francia-1998 y Alemania 2006.

Ha dirigido cursos de verano en la Universidad Menéndez y Pelayo de Santander y Juan Carlos I en Ronda, sobre cuestiones deportivas.

Ha pronunciado conferencias sobre deportes, olimpismo y lenguaje deportivo en diversas universidades españolas. Formó parte de la Comisión de Prensa del Comité Olímpico Internacional durante cinco años.

En 1975 le otorgaron el Premio Promosport en San Sebastián.

En 1989, recibió el Premio de Periodista del Año de “El Mundo Deportivo” de Barcelona.

En 1992 le fue concedido el premio Víctor de la Serna de la Asociación de la Prensa de Madrid. Es el único periodista deportivo que lo posee.

En 2006, le fue otorgada la medalla de plata el Mérito Deportivo. También fue distinguido con la Medalla del Barón de Coubertin que concede el Comité Olímpico Internacional.