Se ha sabido, por fin, que la vicealcaldesa de Madrid estaría dispuesta a integrarse en el PP de Alberto Núñez Feijóo pero como un ‘verso suelto’, o ‘independiente’, e incluso como una ‘corriente interna’ dentro del PP lo que ha sido rechazado en el partido de Génova 13.
No obstante el tanteo que Villacís ha hecho con dirigentes del PP es un dato muy importante que revela su inquietud por el desguace de Cs, y deja en muy mal lugar a sus compañeros de partido donde crece el desánimo y la deserción.
De igual manera que está claro que en el PP necesitan a Villacís dentro de la candidatura de Almeida porque saben que el actual alcalde no es un buen candidato y corre el riesgo de ser derrotado por la izquierda en beneficio de Rita Maestre de Más Madrid.
Sin embargo el hecho de que Villacís se haya ofrecido al PP poniendo sus condiciones tiene una muy difícil marcha atrás. Porque eso ya devalúa la posibilidad de que vuelva a presentarse con Cs como candidata a ser la alcaldesa de Madrid.
Sin embargo este movimiento un tanto pretencioso de Villacís es una muy buena noticia para Feijóo que sobre todo aspira a la integración de Cs en el PP, empezando por Inés Arrimadas y siguiendo por Luis Garicano y Begoña Villacís. La que ahora y como lo veníamos advirtiendo en estas páginas, ya está en las portadas de varios medios de comunicación.
Villacís sabe que los próximos cuatro meses que quedan hasta llegar a las elecciones municipales del 28 de mayo pueden ser para ella un calvario y un fracaso sin paliativos. Y no solo porque corre el riesgo de no lograr ni un solo concejal (necesitaría más de 100.000 votos) y quedar fuera del próximo consistorio sino porque la izquierda y concretamente Rita Maestre pueden lograr la Alcaldia de Madrid.
También cabe la posibilidad, aunque muy remota, de que Feijóo presione a Almeida para que le ceda la cabecera del cartel electoral a Villacís y no solo porque eso mejoraría las expectativas del PP en la capital del Reino sino porque la integración de Villacís en el PP pondría en marcha una dinámica de desbandada en Cs en beneficio del PP que nadie podría parar.
En suma por fin saltó la liebre de Villacís y ahora solo falta por saber dónde y en qué ‘zurrón’ puede acabar. Aunque de momento imaginamos la sorpresa y el desconcierto que invade a la nueva líder -puede que por poco tiempo- de Cs, Patricia Guasp. Y a no perder de vista en esta situación lo que puede ocurrir en próximos días con Edmundo Bal.