En España hay ya unos 27 millones de viviendas, de las cuales unos 20 millones son viviendas principales, de acuerdo con los datos estimados que se derivan del censo oficial. Los pisos que no son vivienda principal tienen un peso importante en España debido a la evolución de los movimientos de población (desplazamientos masivos de familias desde el campo a la ciudad en los últimos 50 años) y sobre todo el tremendo aumento de la actividad turística, que ha multiplicado la existencia de viviendas en algunas zonas de la geografía española, en especial en la España insular u en la costa mediterránea.
Para la población existente, en torno a los 47 millones de habitantes, no es una cifra elevada. Aunque se habla de forma recurrente de una explosión inmobiliaria que podría disparar los precios, la realidad de las cifras parece mostrar una situación bien diferente. En España el precio del alquiler resulta bastante elevado y el número de viviendas, sobre todo en estos últimos años, ha quedado por debajo de las necesidades, ya que muchos jóvenes han alargado de forma excesiva el periodo de tiempo que viven en el domicilio paterno, aunque existen razones de tipo económico que explican en gran medida esta demora en la emancipación.
Lo cierto es que el precio del alquiler de viviendas ha subido bastante en los últimos tres o cuatro años, desde la fase más débil del ciclo económico. No había hasta ahora estadísticas muy fiables del coste real del alquiler de viviendas, ya que las que se suelen manejar proceden de fuentes que no siempre reflejan la realidad de lo que se paga por un alquiler sino lo que se pide y se ofrece por el mismo, que no siempre coincide con la realidad. Ahora, el Ministerio de Fomento se ha tomado en serio la tarea de ofrecer transparencia a una actividad en la que no siempre las cifras brillan por su autenticidad.
Resultado de estas evaluaciones es saber que el precio medio de alquiler en una ciudad como Madrid, el principal mercado del país, es de 819 euros mensuales, algo por delante de Barcelona, en donde el alquiler mensual cuesta 769 euros al mes. Lejos de las cifras de las dos grandes urbes españolas, se encuentran los precios de ciudades como Lugo (336 euros) o Soria (409 euros mensuales), que se sitúan en la zona más baja del baremo de precios. Menos de la mitad de lo que cuesta en alquiler en alguna de las grandes capitales españolas.
La importancia del alquiler ha sido creciente en España, un país en donde la cultura colectiva ha estado siempre muy inclinada a la propiedad como fórmula de ahorro y de acumulación patrimonial. En los últimos años, el alquiler ha ido en aumento ante la dificultad de afrontar desembolsos importantes que exigen compromisos crediticios que no han sido fáciles en los últimos tiempos, tanto debido a la alta tasa de paro como a las dificultades de los jóvenes por emanciparse a una edad razonable una vez resuelta la exigencia del empleo propio y estable y también debido a las dificultades para obtener financiación. Aumentar el acceso de los jóvenes a la vivienda e incluso al alquiler pasa por un aumento de la actividad constructora y un deseable descenso de los precios, tanto de compra como de alquiler.