El Mundialito de Clubes que algunos llaman Mundial, dándole una categoría impropia por lo que significa la palabra y lo que engloba cuando se refiere al mundo futbolístico, tiene gran catalogación porque juega el Real Madrid. En otras circunstancias, con un equipo europeo de menor cuantía, tal vez no nos daríamos cuenta de que se disputa. El entrenador del club madrileño se queja por la cantidad de partidos que ha de jugar su equipo. Pero ya he dicho, creo, que no hay manera de renunciar a ello si se quiere estar en bodas, bautizos y comuniones.
El Madrid no se priva, por su indudable categoría, y los títulos que obtiene, de ninguna organización internacional. Y esta, que se juega en Marruecos, como otras, está montada para obtener beneficios. El fútbol actual no se conjuga otro verbo que no sea el de cobrar. Aquí nadie se priva de hacer caja y los organismos internacionales que manejan esta clase de torneos se benefician económicamente y por ello que se lleven más parte los clubes participantes no debe extrañar a nadie. Ni puede ser objeto de queja como en el caso de Ancelotti. Aquí hay que estar al plato y las tajadas. Comprendo que al entrenador le preocupen los hartazgos de torneos. Sobre todo, porque en este momento ya tiene tres piezas fundamentales en el taller de reparaciones. Courtois, Militao y Benzema no juegan el primer encuentro. La semifinal contra el campeón egipcio el Al Ahly permite guardar reposo a los citados. No obstante, dado que la final será el sábado al entrenador aún le cabe la esperanza de que los médicos den el alta a los lesionados.
El Madrid no está en plenitud y de ello da constancia la Liga en la que se ha distanciado del Barça, aunque ello no es cuestión irremediable. Hay preocupación en la Casa Blanca, pero el campeonato es muy largo y el Barça no es muy de fiar.
En Mundialito puede ser respiro tras lo ocurrido en Mallorca, La ausencia de los tres citados podría ser casi dramática si se prolongara. El puesto de Militao puede ser cubierto sin grandes problemas. Es historia diferente que no puedan jugar Courtois y Benzema. Son más que la columna vertebral.
Posdata. El fútbol europeo está en manos de inversores de todo tipo. En Inglaterra han tomado nota de las irregularidades económicas del Manchester City. En Francia también hay problemas a causa del juego financiero del PSG. Las conversiones en sociedades anónimas han dado más dinero y menor presencia del aficionado de toda la vida.