Gobierno renovado que precisa aterrizaje: “por sus obras los conoceréis”

Gobierno renovado que precisa aterrizaje: “por sus obras los conoceréis”

EFEEl presidente del Gobierno, Pedro Sánchez,

El nuevo gobierno de Pedro Sánchez responde al modelo del precedente, por un lado de coalición con cinco carteras del grupo minoritario y 17 bajo disciplina del presidente, entre ellos cuatro calificados de independientes, aunque muy afectos al PSOE y a Sánchez. Los 22 miembros del gabinete militan en seis partidos (PSOE, PSC, Sumar, Comunes, Izquierda Unida y Mas País). Pero todos ellos leales al presidente, como no podía ser de otra manera. Es un gobierno de continuidad respecto al anterior, aunque con nueve caras nuevas y otros tantos cambios en la composición de los ministerios que requerirá en proceso de aterrizaje y ajuste que llevará varios meses. De manera que un nuevo viejo gobierno.

La arquitectura del gabinete mantiene la estructura tradicional de un gobierno con varios ministerios de primer nivel a los que se anexionan competencias nuevas: Economía, Exteriores, Interior, Defensa, Hacienda, Trabajo, Transición Ecológica, y Agricultura permanecen en su estructura tradicional, con la única novedad de que la titular de Hacienda alcanza el rango de vicepresidenta. Novedad supone que a Presidencia se unan Justicia y Relaciones con las Cortes (tres en uno) que responde al extraordinario poder de Félix Bolaños convertido en superministro político y brazo derecho del presidente, sin rango de vicepresidente nominal. pero con competencias propias de un primer vicepresidente efectivo.

Aguas abajo el encaje de competencias entre uno y otro ministerio es lo más frecuente con el desconcierto inevitable de funcionarios y despachos hasta que se integre la nueva organización. Sanidad sigue igual, con escasas competencias y funciones. Aparece un nuevo ministerio de Juventud e Infancia desgajado de Asuntos Sociales, al que se compensa con Consumo; se mantiene Igualdad, aunque con relevo de todo el grupo dirigente que pasa a disciplina socialista frente a la anterior “podemita” que pierde todo su poder desalojados de este ministerio y del mismo gobierno.

Deportes se desgaja de Cultura (cedida a Sumar) para quedar en manos socialistas integrado en Educación. El viejo ministerio de Obras Públicas, sometido a diversas nominaciones a lo largo del tiempo, se desdobla en uno de Transportes y otro de Vivienda a los que llegan dos titulares sin conocimientos previos de la materia. Tardarán unos meses de enterarse de la materia, o quizá pasen sin entender de nunca la asignatura.

Cambian de titular dos ministerios de carácter técnico, a los que conviene llegar aprendidos: Industria y Turismo y Seguridad Social e Inmigración. Al primero llega una persona con cuota del PSC y una perfil adecuado para el empleo, aunque distante del mismo. Para la Seguridad Social llega una persona que desconoce la materia y que tendrá que ponerse al día en la complejidad de la materia.

Una incógnita es la tarea encomendada a José Luis Escrivá, desgajada de Economía, y sobre la que no hay nada descrito, ya que por un lado suena a compás de espera en tanto se resuelve el destino de la vicepresidenta Calviño y por otro no suena a nada. Asuntos Sociales pierde a una persona que conocía la materia (Nacho Álvarez) por mor de las tensiones caprichosas de Podemos, para quedar encomendado a un joven político sin experiencia en la materia que también tardará unos meses en enterarse del asunto.

La Educación, la Ciencia, las Universidades quedan en manos de dos ministras que nada tenían que ver con las materias, la dos repiten gabinete con competencias renovadas que les exigirán unos meses de aterrizaje.

En resumen, un nuevo-viejo gobierno típico del sanchismo que muchos componentes, sustituibles todos ellos a medida que evolucione la legislatura. La tarea fundamental del gobierno está escrita en los pactos de investidura que pasan por los viejos ministros y fundamentalmente por el presidente.

Al fin de cuenta sirve la máxima evangélica que cuenta el evangelio de Mateo: dijo Jesús en el sermón de la Montaña: “Por sus obras los conoceréis”.

Sobre el autor de esta publicación

Fernando González Urbaneja

Nacido en Burgos en 1950, licenciado en Ciencias Políticas y titulado en Periodismo.

Desde 1999 hasta el año 2006 profesor asociado del departamento de Historia Económica en la Universidad Carlos III.

En la actualidad es colaborador habitual de los diarios ABC y otras publicaciones. Desde noviembre de 2003 a diciembre de 2011 preside la Asociación de la Prensa de Madrid y desde abril del 2004 hasta septiembre de 2008 Presidente de la Federación de Periodistas de España (FAPE).

Autor de los libros “Rumasa” (Planeta, 1983); “Banca y poder, la pasión por ser banquero” (Espasa Calpe, 1993); “Ética en la empresa informativa” en “Ética y empresa, visión multidisciplinar”, (Fundación Argentaria-Visor, 1997).

El Gobierno le designó en mayo de 2004 como miembro del comité de expertos para la reforma de los medios de comunicación de titularidad del Estado.

Actualmente es Decano del Departamento de Periodismo y Comunicación Audiovisual Facultad de Ciencias de la Comunicación Universidad Antonio de Nebrija.