Ten mucho cuidado Juanma Moreno, nuestro presidente del Sur, con los ‘Idus’ del 28 de mayo porque si el ínclito Alberto Núñez Feijóo, que lleva una mala racha de errores, no sale bien parado en los comicios municipales y autonómicos, el 29-M habrá remolinos en las aguas del PP. Y no van a faltar intrigantes que, echando caramelos por la boca, te susurren al oído que ‘el día que tú naciste, grandes señales había’ que ya anunciaban que serías el presidente del Gobierno de España.
No en vano, en la capital del Reino y flanco ‘aznarista’ del PP, mediático y político, donde se cuajó el ‘crimen de Pablo Casado’, empiezan a florecer taimadas críticas contra Feijóo. Y ya dicen que es un blandito, que no sirve, que no va a ganar, que no tiene equipo, que está muy deprimido y que no le gusta nada vivir en Madrid.
Y ya están los alfiles de Aznar, Cayetana, MAR y compañía, zarandeando el tablero del PP y hablando de la necesidad de celebrar, a la vuelta del verano, un ‘Congreso ideológico’ que puede convertirse en una conspiración interna para lanzar a Isabel Ayuso a las generales de diciembre, en el caso de que Feijóo no despunte el 28-M y que la madrileña, siguiendo tus pasos, alcance la mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid.
Y te decimos esto, Juanma Moreno, porque ahora en Semana Santa van a venir a Sevilla para ver ‘la madrugá’ y a Málaga para cantar el himno de la Legión a ‘Cristo de la buena muerte’ dirigentes del PP y prebostes del poder económico. Y te bailarán el agua y el oído, para decirte que ya tienes que ir pensando en tu posible desembarco en Madrid y en política nacional.
Y yo te digo, presidente Juanma Moreno, que ni se te ocurra poner un pie en Madrid. Porque ese Madrid -con el que soñó Susana Díaz, y se la cargaron antes de subir al tren- es un territorio comanche envenenado por las ‘furias’ del poder capitalino, que son más poderosas que las ‘meigas’ de Feijóo. Y estos no son tiempos para mudanzas sino tiempos para la consolidación.
Además, ¿qué más quieres que el placer de gobernar el jardín de Europa, donde se está instalando el gran talento empresarial y tecnológico de la UE? Una tierra prometida, con un pueblo feliz, generoso, solidario y genial en la que no cabe más honor y legítima ambición que aspirar a ser el heredero de Abderramán III. ¿Qué te falta, Juanma Moreno, en el Sur que otros tengan en Madrid. ¿Más poder, pompa, dolor de cabeza y constante insomnio?
Y si Bendodo insiste y los confederados de Sánchez empujan el país hacia la ‘España plurinacional’, ¿quién le va a discutir a Andalucía el título de la primera nación de una España de naciones, por historia, cultura (‘las tres culturas’), lengua a la andaluza, folclore, turismo -la primera industria de España-, belleza y riqueza medio ambiental, etcétera?
Ahí tienes a tu amigo y aliado a Alejandro Rojas Marcos, gran capitán del andalucismo y del ‘Al Andaluz’ español renovado y solidario. Y por ahí anda el ‘joven’ Javier Arenas que se sabe todo lo de Madrid. Escúchalos.
Madrid no vale una misa como París. Allí lo que valen son los funerales. Y los entierros pomposos, con carrozas y corceles emplumados, como el de Tierno Galvan. Pero en esta capital, ahora convertida en el Miami de Europa por las elites latinoamericanas que huyen de los países bolivarianos, en este Madrid hay dos traidores por metro cuadrado, y uno es del PP.
Es verdad que, por abril y en Las Ventas, saltan al ruedo toros cuajados y astifinos que buscan la muerte gloriosa sin piedad. Pero eso no se puede comparar con la fiesta nacional en La Maestranza y en un domingo de Resurrección. Ni se te pase por la cabeza, Juanma Moreno, soñar con la tentación de Madrid porque, como una vez dijo Rafael el Gallo de Sevilla y se lo vamos copiar ‘Andalucía está, donde tiene que estar’.