El Gobierno de coalición supera una semana convulsa

Montero habla con Rufián antes de la votación en el Congreso que acabó con su ley del 'Sólo sí es sí'

EFEMontero habla con Rufián antes de la votación en el Congreso que acabó con su ley del 'Sólo sí es sí'

La semana que ahora termina ha sido la más difícil y más convulsa de las muchas sufridas en el Gobierno de coalición que preside Pedro Sánchez. Y cuya autoridad sobre los ministros de Unidas Podemos quedó destrozada por públicos enfrentamientos y mutuas descalificaciones entre socialistas y podemitas como se vio en las descalificaciones cruzadas y en los tensos debates del martes en el Congreso de los Diputados.

Donde el presidente Sánchez no se dignó a comparecer y donde la gran mayoría de sus ministros dejaron solas en el ‘banco azul’ del Congreso a las ministras Montero y Belarra. Lo que luego se repitió durante la votación de la reforma de la Ley del sí es sí propuesta por el PSOE y que Sánchez no votó.

En realidad la reforma de la Ley Montero salió adelante sobre todo gracias al PP, que quiso así reafirmar su ‘moderación’ y distanciarse de Vox. Pero lejos de agradecérselo Sánchez a Feijóo el presidente agredió personalmente al líder del PP, transmitiendo el mensaje de que si ‘arriman el hombro’ -como les pide Sánchez- se lo machacan.

El resultado final es que el Gobierno de coalición, seriamente vapuleado por sus disputas internas, continúa gracias al PP. Dejando planear la sospecha de que las mutuas acusaciones de PSOE y UP eran sólo teatrales porque de esa manera ambas partes mantenían irreductibles sus posiciones y al final el Gobierno seguía en pie con la ayuda de Feijóo.

Lo que no hubiera ocurrido si Feijóo hubiera exigido a Sánchez el cese de la ministra Montero como condición previa al apoyo del PP a la reforma de la Ley del sí es sí. A la que aún le queda por delante un largo recorrido hasta que entre en vigor.

Por supuesto cabe imaginar esta batalla cainita en el interior del Gobierno tendrá un alto coste electoral tanto para el PSOE como para UP durante las próximas elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo. A lo que se  les suma el constante goteo de delincuentes sexuales beneficiados por la Ley Montero que pronto llegarán a la cifra de 800, y 80 de ellos en libertad.

De manera que el Gobierno sigue, aunque renqueante y bastante tocado camino de nuevas discrepancias internas como las que ahora se anuncian sobre los alquileres en la futura ley de Vivienda. Aunque a corto plazo unos y otros podrán escenificar una tregua y reencuentro durante los debates de la moción de censura planteada por Vox que tendrá a Ramón Tamames como candidato a la presidencia del Gobierno, aunque sólo de manera testimonial porque sabido es que perderá la votación.

Sobre el autor de esta publicación

Pablo Sebastián

Pablo Sebastián, actual Editor y fundador del diario digital Republica.com, ha sido el primer periodista en fundar un diario exclusivamente digital de habla hispana en España y America, al iniciar esta su etapa profesional y digital en el año 1997 con EstrellaDigital.es, hace ya 25 años.

Pablo Sebastián, nacido en Córdoba en 1947, es licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra y desarrolló una amplia carrera profesional en la que trabajó en todos los diarios impresos de la Transición: ABC, Diario 16, El Pais, El Mundo y El Independiente que fundó y dirigió.

Asimismo fue delegado del Periódico de Cataluña en Madrid, director de Interviú, subdirector de Tiempo, y corresponsal de EFE, ABC y Cambio 16 en Bruselas. Y más adelante corresponsal de TVE en Paris, después de haber dirigido uno de los telediarios (TD3) de la primera cadena de TVE y haber colaborado en radio con RNE, COPE y Onda Cero.

Pablo Sebastián fue vicepresidente de la APE, Asociación de Periodistas Europeos, y luego secretario general y fundador de la AEPI, Asociación de Periodistas y Escritores Independientes. Tiene en su haber el ‘Premio del Periodismo Europeo, el Premio del Movimiento Europeo, el Premio Luca de Tena, así como el Premio a la Libertad de Expresión. Durante la Transición y en la oposición al franquismo fue representante, durante su estancia en Bruselas, de la Junta Democrática de España ante la Comisión Europea y el Parlamento Europeo.