A Iglesias lo liquidará Errejón

Íñigo Errejón, en una rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, en el Congreso de los Diputados

Europa PressÍñigo Errejón, en una rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, en el Congreso de los Diputados

Se dijo de Pablo Iglesias -como de Albert Rivera- que era un tío muy listo y que lo demostró con su llegada al Gobierno de España de vicepresidente de Pedro Sánchez.

Pero una vez que depuró a los fundadores de Podemos para quedarse con el control absoluto del partido y una vez que este personaje tocó ‘el cielo del poder’, donde demostró ser un vago de siete suelas, Iglesias se desmoronó.

Y salió huyendo del Ejecutivo con la excusa de ‘ser más útil’ a Podemos, en las elecciones madrileña de 2021. Y obsesionado en competir con Errejón y Más Madrid.

Porque Iglesias sabía, y a lo mejor lo vio en un sueño o en una revelación, que Errejón -al que conocía muy bien- acabaría con Podemos y con él como parece que ocurrirá en un plazo no lejano. Y por eso Iglesias, al grito ridículo de ‘¡alerta fascista!’ se lanzó a la campaña madrileña de 2021 y se estrelló.

Y entonces, mintiendo como su maestro Sánchez y convencido del alto nivel de rechazo (más que Sánchez) que su persona o personaje provoca anunció que dejaba la política. Cuando lo mas cierto es que fueron los votantes de la extrema izquierda radical los que le han abandonado a él.

Y a su partido que dejó de llamarse Unidas Podemos y a sus dos pupilas Montero y Belarra (‘Las niñas del resplandor’ las llama Carlos Herrera) que van dándose de porrazos en la política española con su ley del sí es sí y de mal en peor.

Y ahora, cuando teme el fin de Podemos en los comicios del 28-M, Iglesias denuncia un ‘¡golpe de Estado!’ de la derecha madrileña -‘mafia madrileña’, dice- para acabar con Podemos y Bildu. Lo que da una idea del nivel del desvarío y de la desesperación del fundador de Podemos.

Temeroso como anda Iglesias de que Podemos se quede fuera de casi todo: la Asamblea de Madrid, el parlamento valenciano y de la plataforma Sumar. Y si eso es así también se quedará casi fuera del Congreso de los Diputados donde las encuestas le dan a Podemos un escaso puñado de diputados que acabarían sentados en el Grupo Mixto del Congreso.

Y todo ello mientras que su ex amigo y ex compañero Íñigo Errejón, al que depuró en Podemos, se sentará en el Congreso junto a Yolanda Díaz -otra a la que Iglesias acabó llamando ‘miserable’, como también atacó a Manuela Carmena- en el Grupo de Sumar, que probablemente será el tercero o el cuarto Grupo del Congreso en la próxima legislatura.

Y cuando Alberto N. Feijóo presida el Gobierno de España y en el PSOE los barones socialistas exijan el relevo de Pedro Sánchez, tras el tiempo fallido, anti español y autocrático del ‘sanchismo’. El que nada tuvo que ver con el moderado PSOE de los años de la Transición.

Iglesias va camino de convertirse en ‘muñeco roto’ de la extrema izquierda, sin haber sido de izquierdas. Porque una verdadera izquierda nunca habría pactado con los golpistas de ERC de Junqueras (esos sí golpistas), con los etarras candidatos de Bildu, ni justificado los crímenes de Putin en Ucrania.

Por lo que a Iglesias, de acuerdo con esa misteriosa revelación o maldición de Errejón que le persigue, le espera como el bien lo sabe un patético final del que ya está empezando a ‘disfrutar’.

Sobre el autor de esta publicación

Marcello

Un Jack Russell de pura raza, que cursó estudios de criminología en Oxford, y se licenció "cum laude" en el master de sabuesos de Scotland Yard. En Inglaterra conoció a un bisnieto del perro de Baskerville y en Estados Unidos (donde tiene a dos primos hermanos, Uggie ganador de un Oscar con 'The Artist' y Eddie, el perro del psiquiatra Frasier Crane) trabajó a las órdenes del FBI. De regreso a España se dedicó al periodismo que es profesión mas arriesgada que la lucha contra el crimen internacional, y en esto de Internet lleva casi doce años y sin descansar