El calvario de Javier Fernández
El presidente asturiano y de la Gestora del PSOE Javier Fernández debe ser un santo o al menos lo parece. Solo por tener que desenvolverse entre intrigas y ambiciones de Pedro Sánchez, Susana Díaz y Miquel Iceta ya merece un reconocimiento público. Si añadimos las presiones que recibe de Rajoy e Iglesias, y ahora las de los sindicatos (que están fuera de juego) veremos que su posición, amén de delicada y propia de un malabarista, debe ser harto agotadora y sin visos de solución.
Hasta el punto que el primero en querer el congreso del PSOE cuando antes debe ser él. Pero la faraona de Triana y olé no tiene prisas y quiere que Sánchez se cueza a fuego lento y que se desespere de tanto esperar para que su desembarco en la secretaría general del PSOE se convierta en un paseo militar.
Además Susana Díaz y otros barones del PSOE y presidentes regionales quieren que los socialistas colaboren con el gobierno del PP para aprobar el techo de gasto de 2017, pero Rajoy incluye en la operación los Presupuestos. Y ahí está el problema, con lo que todos los actores están pillados en la misma trampa, a la que se quieren sumar CC.OO. y UGT a ver si pescan alguna foto y logran salir en diciembre a la calle para evitar que se la quede Podemos.
Al final todo apunta a que Javier Fernández se va a llevar todos los palos y tendrá que pactar con el PP porque está claro que el PSOE no quiere elecciones y menos aún en vísperas de un congreso del partido y cuando aún no tienen ni líder ni candidato para esas elecciones, con las que sueña Podemos para intentar el sorpasso por segunda vez.
En realidad la 'operación Susana' parece cerrada pero nunca se sabe porque la andaluza se ha desgastado mucho y se le ha visto la melena entre los cazadores de Sanchez. Y si como pretende Susana Díaz se puede ser secretario general del PSOE y presidente de Comunidad Autónoma entonces podrían aparecer otros candidatos como Fernández Vara, García Page y el propio asturiano Javier Fernández.
Pero cada cosa a su tiempo y este fin de semana el PSOE tiene en la Monumental de Barcelona el toro romo y resabiado del PSC. Y todo ello mientras se inician con el PP negociaciones como la de Educación que parece ir bien porque el gobierno ha puesto el marcador a cero y ello facilita las conversaciones.
Con el que no hay diálogo posible es con Pedro Sánchez que pronto llegará a las tierras asturianas de Javier Fernández, lo que al presidente de la Gestora le parece 'normal'. Como normal empieza a ser la segunda cacería de Sánchez, está en campo abierto, con duras declaraciones de sus adversarios como Eduardo Madina que ha dicho de Sánchez que solo tiene un proyecto 'personal'.