De Rubalcaba a Aznar
El ministro de Interior está desaparecido de la campaña electoral del PSOE, imaginamos que ocupado con ETA y Bildu, puede que todavía convaleciente de sus recientes males, y sobre todo muy enfadado con Zapatero porque le ha engañado como pretendía engañar al chino aquel de los fondos de inversión que finalmente dijo que ni un euro y menos aún los 9.000 millones que cantaba el presidente.
Todo apunta a que Zapatero hará con Bildu lo mismo que hizo hace cuatro años con ANV, quitar unas pocas listas y dejar la mayoría, cuando lo que debería de hacer a nada de que aparezca un sospechoso de pertenencia a Batasuna o a ETA es expulsar a Bildu y EA de las elecciones porque ya se sabe que los amigos de ETA están ahí burlando la ley.
Rubalcaba y su guardia pretoriana de barones del PSOE están indignados con el nuevo protagonismo creciente de Zapatero quien, lejos de pasar a la reserva para evitar que las elecciones se conviertan en un plebiscito sobre su persona y presidencia, está otra vez en plena euforia como se vio en el último mitin del País Vasco.
La verdad es que Zapatero ha engañado a Rubalcaba. Y lo ha hecho con premeditación y alevosía, después de pedirle que asumiera la vicepresidencia primera y asegurarle que él sería el sucesor. Y lo ha engañado primero retrasando el anuncio de su retirada, luego montando las primarias para el día después de las elecciones de mayo, y finalmente empujando a la Chacón para competir en las primarias y a sabiendas de la tensa relación del vicepresidente primero y la ministra de defensa.
Naturalmente, lo que gustaría a Rubalcaba es dar un paso atrás en la campaña electoral y dejar a Zapatero a ver si se estrella de una vez y carga con la derrota el solito. Pero la maldad de la situación le obliga a comparecer dado que de esa manera podrá hacer, en mítines y ante sus militantes, campaña a favor de su proclamación como el sucesor de Zapatero. Algo que apoyaría casi todo el partido a nada que los sufridos militantes socialistas se imaginaran a la Chacón en un mano a mano electoral con Rajoy, y luego imaginaran el mismo debate entre Rubalcaba y el líder del PP.
En realidad la pregunta que habría que hacer –y que se harán muchos españoles- es la siguientes: en caso de una intervención financiera de la UE para el rescate de España ¿quien considera que sería mejor presidente del gobierno para hacer frente a semejante situación? He aquí un total de seis nombres y elija usted: Zapatero, Rajoy, Chacón, Cospedal, Rubalcaba y Aznar. Tenemos la impresión que el “friki” del bigote podría ganar.