El expresidente estadounidense Donald Trump ha comparecido este lunes en el tribunal de Nueva York donde ha dado comienzo el juicio civil en su contra por fraude continuado durante años en la Organización Trump, un caso impulsado por la Fiscalía del estado de Nueva York, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad.
Trump advirtió de que acudiría en persona para los argumentos orales con el objetivo de limpiar su nombre y reputación, pero no se le vio entrar por la escalinata frente a la que estaba apostada la prensa, en una plaza de Foley Square vallada y llena de policía, prensa, y manifestantes en su contra, ya que lo hizo por una entrada lateral.
El expresidente entró en torno a las 09.30 de la mañana (13.30 gmt) en la Corte Suprema estatal y también han accedido junto a él sus hijos Eric, Donald Jr. y otros socios acusados de inflar el valor de los activos de la empresa para obtener ventajas económicas.
En el interior, Trump señaló a los medios que se trata de una "continuación de la caza de brujas" contra él, consideró el caso un engaño y se reafirmó en la validez de sus declaraciones financieras sometidas a escrutinio y en el valor de sus propiedades.
Además, y siguiendo una línea argumental repetida durante meses, aludió a supuestas intenciones de influir en las próximas elecciones -en las que parte como el favorito republicano-: "Esto tiene que ver con una interferencia electoral, pura y simple. Están tratando de dañarme para que no me vaya tan bien como me está yendo en esta elección (del próximo año)".
La fiscal, Letitia James -a la que Trump ni siquiera miró- hizo también unas breves declaraciones y aseguró que "la justicia prevalecerá" ante sus argumentos, que ya han sido suficientes para que el juez resolviera el cargo principal del caso la semana pasada y considerara a Trump, su empresa y sus hijos mayores responsables de fraude, ordenando cancelar sus licencias de negocio en el estado.
En el centro de la plaza, un grupo de dos decenas de manifestantes observaba los acontecimientos con pancartas que acusaban a Trump de ser un criminal y cuestionaban, por ejemplo, “¿cuántos abogados hacen falta para joder la democracia?”.
Aun siendo pocos, eran la mayoría frente a media decena de defensores de Trump que lucían carteles como “Trump ganó”, así como un ciclista que paseaba ondeando una fotografía con el lema “nunca te rindas”.
El juicio durará hasta el 22 de diciembre
El juicio civil contra Trump durará hasta el 22 de diciembre, confirmó este lunes el juez que preside el proceso, Arthur Engoron.
Engoron lo anunció en la apertura del juicio en la Corte Suprema de Nueva York frente a Trump, quien se presentó en persona para asistir a la exposición de los argumentos orales de su defensa e insistió en la validez de sus declaraciones financieras y el valor de sus propiedades.
La semana pasada, el juez ya declaró a los acusados responsables del cargo de fraude en una decisión sumaria, así que lo que se dirimirá en los próximos tres meses son cargos relacionados, como falsedad documental, y la compensación por daños, que la Fiscalía cifra en unos 250 millones de dólares.
No estaba claro si la duración estimada del juicio se mantendría después de esa primera victoria de la Fiscalía, pero el juez mantuvo el calendario y, además, sugirió que quiere un proceso de bajo perfil en el que solo tenga que hablar para aceptar o rechazar argumentos y ordenar pausas, según medios locales.
De acuerdo con CNN, Engoron también pareció referirse a los intentos de Trump de minar su autoridad y aseguró que conoce bien la definición legal de fraude y que, pese a algunos “intentos de tomarlo a risa”, se toma “muy en serio” su labor, clave en juicios como este, en el que no hay jurado.
Trump adelantó que acudiría hoy al inicio del proceso para limpiar su nombre e imagen, un movimiento que algunos analistas han considerado trata de favorecer la candidatura del republicano en las próximas elecciones a la Casa Blanca, que sigue siendo la preferida entre los votantes republicanos pese a que se enfrenta a una larga lista de causas judiciales en los próximos meses.
No está claro si Trump se quedará durante toda la sesión de hoy o si presentará también mañana en el juzgado, pero tanto la Fiscalía como la defensa han indicado que lo llamarán a declarar en algún momento como testigo, así como a sus hijos Donald Jr. y Eric, que también están acusados en el mismo proceso.