Joan Laporta, presidente del Barcelona, tiene derecho a vender humo y para justificar que no ha conseguido nada de lo medio prometido se ha salido con pata de banco. Laporta refiriéndose a los dos fichajes frustrados, a sus dos imposibles, Haaland y Mbappé ha tenido la humorada de afirmar que no paga millones por jugadores que no ganan la Champions. Dicho esto se debió quedar más ancho que largo. El chiste no lo habría mejorado Eugenio. Llegó a la presidencia prometiendo convertir la plantilla en modelo para obtener campeonatos y finalmente, los dineros que tiene en caja no le permiten hacer más esfuerzos que los que le dejan clubes en ruina por sus dirigentes, caso del Valencia, que ha puesto en almoneda a Gayá y Carlos Soler.

El Barça fichará a ambos jugadores valencianistas porque en Mestalla no dejan de echar mano de los cuentos chinos y ahora, que por medio de las operaciones crediticias, hasta calendas graecas, que ha montado Javier Tebas, va a tener euros para mejora el elenco, venderá. El monto más importante de lo que va a recibir está destinado a reforzar las infraestructuras, pero en lugar de intentar acabar el Nou Mestalla, promesa de Lim cuando llegó al club, lo que va a hacer el propietario será volver a engañar a los aficionados valencianistas. Y ello con el pláceme de Javier Tebas, que es el único individuo que protege formablemente a Lim.

Laporta no tiene posibles para componer una plantilla que pueda competir con el Real Madrid. El presidente barcelonista tiene que recurrir a jugadores del mercado nacional como es el caso de los capitanes del Valencia. En este caso actúa con posición ventajosa porque el presidente mestallista, Anil Murphy, desea hacer caja para poder fichar a jugadores de medio pelo y, además, hacer creer a la afición que es el protector de la cantera subiendo al primer equipo a los mejores de la academia de Paterna.

Xavi ya ha dicho claramente que con lo que tiene en el vestuario no es suficiente para embarcarse en grandes aventuras. Bordalás ya ha dicho que hay ser ciegos para no ver lo que tiene en el Valencia. Barça y Valencia van de la mano en lo referente a las precariedades económicas. Lo del Valencia es mucho peor porque está en manos de chinos de Singapur a quienes lo que sucede al lado del Turia les importa menos que una higa. Lo único que desean es hacer negocio, pero hasta ahora ni siquiera han sabido vender el solar del actual Mestalla.

Posdata. El Mundial que se disputará en Catar se ve desde Madrid con menos calor. La visita del jeque refresca económicamente. Servirá para negocios de gas y petróleo y la baja de Mbappé en el PSG para que venga a Madrid. A su jeque ya se le ha concedido la llave de oro.