La primera jornada de Liga de Campeones no fue favorable para los equipos españoles salvo el Valencia que dio la sorpresa en Inglaterra. El Madrid, que fue vapuleado en París ante el PSG, que no contaba con sus mejores hombres, está obligado a recuperar crédito continental ante el Brujas. El Bernabéu, que ha recuperado el cántico de “las mocitas madrileñas”, sin necesidad de repudiar el himno cantado por Plácido Domingo, y ha recuperado ilusión en la Liga nacional está obligado a dar una satisfacción.

También el Atlético está en la necesidad de mejorar el talante europeo tras el decepcionante partido del derbi. Madrid y Atlético no dieron en el Metropolitano la mejor versión de equipo con ambiciones. Tanto en el campeonato nacional como en el europeo han mostrado grandes fisuras hasta el punto de que ninguno de los dos entrenadores tiene clara la alineación.

Zidane no ha conseguido el fichaje de Pogba, aunque se ha encontrado con dos fichajes inesperados: Bale y James. Tal vez podría adoptar postura entusiástica porque a fin de cuentas Florentino Pérez no le ha regalado la guinda del pastel que quería por cuestiones que hicieron insalvables los dirigentes del club británico. No fue indolencia del presidente. Zidane ha de conformarse con lo que tiene en el vestuario y en ello está la Liga de Campeones. La derrota de París tiene que empezar a ser pasado.

Cholo Simeone ha recibido en el vestuario varios jugadores a quienes se les supone que han potenciado el elenco. La grada colchonera se ha hecho grandes ilusiones con el joven portugués Joao Félix. La aportación de este jugador está siendo intermitente y, de momento, no ha justificado la gran inversión. Para que el futbolista pueda rendir de acuerdo con las expectativas, probablemente, Simeone deberá cuidarle algo más. Sustituirlo en el derbi causó cierta sorpresa. Y algo de indignación porque se le suponían acciones que podían llevar a la victoria.

Posdata. Valverde no pudo renovar el titulo mundial de ciclismo. Sería injusto restar valor a cuanto ha conseguido hasta ahora.