Barça y Valencia, también clasificados
La noche europea tenía como exigencias la clasificación del Barcelona como primero de grupo y el pase del Valencia a expensas de intentar en Manchester idéntica posición. Al Barça le costó marcar y el Valencia sentenció en medio partido.
En Atenas jugó el Barça con los mejores. Guardiola no quiso arriesgar más alamares que el dar descanso a Busquets y Maxwell. Tardó instantes en dar al partido su natural fórmula de posesión agobiante de la pelota. Le costó, a cambio, marcar el primer tanto.
Los barcelonistas no se tomaron el partido como una final y marcaron un ritmo tranquilo. Mucho pasecito corto, constantes retrasos del balón para mantener su posición, y escasa velocidad para poder desmontar la defensa contraria.
El juego de toque cuando no se impone la velocidad permite al adversario colocar tupida defensa por la que las paredes son muy difíciles de conseguir. Sucedió lo habitual. Jugada de varios toques, pase de gol y remate de Pedro para apuntarse el primero.
Mientras el Barça tenía dificultades para hacerse con el triunfo el Valencia tenía dos momentos en que pudo marcar y, padeció dos sustos que estuvieron a punto de complicarle la vida. La reacción fue fulminante.
En media hora ya ganaba por 3-0 y no conforme con ellos Joaquín hizo el cuarto con lo que la visita al vestuario se hizo con absoluta tranquilidad. El partido estaba sentenciado y la clasificación para la siguiente ronda conseguida. Para ser primero tendrá que ganar en Manchester.
En Mestalla se consumó la goleada que en esta competición es más que de escándalo por lo poco habitual. La delantera funcionó a pleno rendimiento y con el triunfo del Manchester en Glasgow su clasificación para la siguiente ronda se consumó.
El Barça mejoró durante la segunda mitad y consiguió la tranquilidad con los goles. Uno de ellos, el de Messi fue producto de una jugada en que participó medio equipo. Fue jugada para recordar.
Madrid, Barça y Valencia han pasado el primer corte.