¿Cómo limpiar una Nintendo Switch?

¿Cómo limpiar una Nintendo Switch?

Por su formato semi-portátil, la consola Nintendo Switch es una de esas que se acaban manchando o llenando de polvo en algún momento, sobre todo si están en las manos de los más pequeños de la casa. Llega un momento en el que es obligatorio someter la consola a un proceso de limpieza que ayude a que se encuentre, de nuevo, en perfecto estado. En las próximas líneas te explicaremos todo lo que hay que hacer para que limpies la Switch de Nintendo sin necesidad de ser ni un experto en limpieza de dispositivos ni un MacGyver.

¿Qué necesitas para poder limpiar una Nintendo Switch?

Nada especial ni complicado de conseguir. Como en la limpieza de otro tipo de dispositivos, tienes que tener a mano un paño que se encuentre húmedo, otro paño de similares características, pero en este caso que esté seco. También necesitarás un bastoncillo de algodón (quizá más de uno dependiendo de su grosor, calidad y resistencia).
Esta guía te servirá para limpiar cualquiera de las versiones de Nintendo Switch, desde el modelo normal hasta la edición OLED o la versión portátil Switch Lite. Básicamente, todos los modelos de la consola son similares, por lo que el proceso de limpieza se mantiene.

¿Qué hay que hacer antes de comenzar con el proceso de limpieza de Nintendo Switch?

Lo primero es asegurarse de que la consola se encuentra totalmente apagada. No hace falta que se haya quedado sin batería. Con que te asegures de que no está enchufada será suficiente. Eso sí, tampoco tiene que estar conectada en modo de reposo. Tiene que estar totalmente apagada. A continuación, tienes que retirar los dos Joy-Con y comprobar que no haya ningún otro tipo de accesorio conectado, como una batería externa u otro tipo de mando.

¿Cómo limpiar la consola Nintendo Switch?

Para empezar, colocáte sobre una mesa que se encuentre limpia que te servirá de base para todo el proceso de limpieza. Comienza poniendo un poco de agua en uno de los trapos. Pásalo por la pantalla y por los mandos Joy-Con. Si todo está más o menos limpio, no tendrás ningún tipo de problema en hacer la limpieza. Pero si te encontrases con que la pantalla está pegajosa y que incluso tiene algo de grasa, en ese caso sí que necesitarías hacer una limpieza a fondo.

En ese tipo de caso, lo que recomienda Nintendo es hacer uso de un desinfectante que esté formado por un 70% de alcohol y que esté pensado para el público (y no de tipo industrial). Es importante seguir las indicaciones de Nintendo, dado que, al fin y al cabo, estás usando un producto agresivo como un desinfectante en un dispositivo que no es precisamente barato. Si tuvieras que usar el desinfectante, aplícalo en el paño como en el caso del agua, y limpia con cuidado y cariño.
Tras limpiar a fondo, utiliza el paño que está seco para pasárselo a la consola y a los Joy-Con con la misión de secarlo todo y que se quede con el mejor aspecto posible. Si necesitas usar otro trapo más suave para terminar de secar y perfilar el aspecto final, no dudes en hacerlo. Es importante que no quede ningún tipo de humedad.
Los bastoncillos de algodón los puedes usar para introducirlos en las rendijas y en cualquier posición que creas que necesita un poco de limpieza a fondo. Por otra parte, el sistema de raíles que sirve para hacer la conexión de los mandos Joy-Con es delicado y se tiene que limpiar con prudencia. Es fundamental que te asegures de que no hay polvo o grasa que pueda estar entorpeciendo el uso de los mandos. Es ahí donde suele ser más difícil llegar a todos los espacios, por lo que no tengas problema en usar tantos bastoncillos como necesites. Aunque, eso sí, siempre con suavidad.
Otro lugar donde también puedes llegar a utilizar los bastoncillos de algodón es la ranura del puerto USB-C, en la cual se podría haber quedado polvo acumulado. El proceso tendrá que ser el mismo. Y, por otro lado, lo que nunca debes hacer es usar un aspirador o similar en cualquiera de los espacios que tiene la consola. Eso podría llevar a que sufriera problemas serios en cuanto a su rendimiento. El aire comprimido que se vende en botes y que tan bien limpia los ordenadores portátiles, tampoco se puede usar en una Nintendo Switch.
Tras todo esto, a podrás conectar los Joy-Con de nuevo o los demás accesorios que tuvieras puestos. Como habrás visto, el proceso de limpieza no es traumático ni precisamente complicado. Tus hijos también se pueden ocupar de ello sin problemas. No obstante, asegúrate de supervisar las primeras veces para que no hagan ningún tipo de locura que pueda llegar a afectar a la consola. Siempre hay que ser cuidadoso con el uso de agua, desinfectantes y cualquier otro líquido o químico.