Los efectos de la Ley del 'solo sí es sí'

Sánchez… o lo que diga Irene Montero

El presidente del Gobierno siempre ha seguido las directrices de la ministra de Igualdad en todas las leyes. Hay malestar en parte del partido por la influencia que tiene sobre el jefe del Ejecutivo y no escuchar las propuestas del feminismo socialista

El presidente Sánchez, besa a la ministra de Igualdad Irene Montero con Marlaska al fondo

EUROPA PRESSEl presidente Sánchez, besa a la ministra de Igualdad Irene Montero con Marlaska al fondo

La ministra de Igualdad, Irene Montero, no es ministra por la cuota socialista. Pero es un clamor en el Gobierno y el PSOE la influencia que ejerce sobre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez -que no está exento de un gran malestar interno en el partido-, en torno a sus leyes y a sus planteamientos en materia de Igualdad, algunos de ellos muy alejados de los postulados feministas del PSOE.

Pero Montero, con la aquiescencia de Sánchez, ha ganado todas las batallas hasta ahora y cada pulso que ha planteado en sus planteamientos legislativos. Desde que pisó la sala del Consejo de Ministros marcó la hoja de ruta de su Ministerio, y ni la contestación interna tanto en el Gobierno -sobre todo en la etapa de Carmen Calvo- como en el partido le ha hecho moverse un ápice de sus objetivos.

Así, sacó adelante un pulso acelerado en el 2020 con la presentación apresurada de la ley del 'solo sí es sí' para buscar un golpe de efecto de cara al 8-M de aquel año, con el Gobierno de coalición recién estrenado.

La entonces vicepresidenta del Gobierno advirtió ya de que aquella propuesta legislativa tenía grandes lagunas, que necesitaba más tiempo de estudio, pero Sánchez hizo caso omiso y posibilitó su aprobación. En marzo de aquel año el anteproyecto llegó al Consejo de Ministros.

Pero el pulso más sonado fue con la 'ley trans'. Con la total oposición de Carmen Calvo el anteproyecto de ley llegó al Consejo de Ministros a finales de junio. Y quince días después hubo la primera gran crisis de Gobierno en el Ejecutivo de Sánchez y fue destituida la vicepresidenta del Gobierno. No fueron pocos los analistas políticos que achacaron esa destitución a su derrota frente a Irene Montero por haberse impuesto en la aprobación de la citada ley. Una vez más, Sánchez hizo lo que le decía Montero.

También ganó el pulso Montero en la tramitación de la ley del 'solo sí es sí' cuando el Grupo Socialista quedó casi humillado al tener que retirar sus enmiendas a dicha ley sobre prostitución y castigo al proxenetismo. Unidas Podemos y los habituales socios parlamentarios doblaron el pulso a los socialistas, sin que desde el Gobierno se moviera un dedo. El PSOE se consoló presentando un proyecto de ley para la abolición de la prostitución que, por ahora, duerme el sueño de los justos y no tiene tanta prioridad como la 'ley trans'.

Lo último de Sánchez para no desautorizar a la ministra de Igualdad han sido unas declaraciones en la que defiende la ley del 'sólo sí es sí' y pide esperar a que los tribunales fijen criterios.

La postura del presidente del Gobierno contrasta con las voces en el PSOE y entre algunos miembros del Ejecutivo que claman por una revisión urgente de esta ley para evitar las graves consecuencias que está teniendo.

Las repercusiones en el PSOE

El posicionamiento de Sánchez en toda esta etapa está teniendo serias repercusiones en el partido y el movimiento feminista, aunque desde el Ejecutivo y desde Ferraz se sigue ignorando la situación. Posiblemente, la más grave es que las principales militantes del partido en materia de Igualdad se han constituido en la Asociación de Feministas Socialistas para denunciar, precisamente, las políticas de Igualdad que se impulsan desde el Ministerio de Irene Montero con el apoyo de Pedro Sánchez. Dicha asociación acaba de pedir la retirada de la 'ley trans' para no cometer los mismos errores que con la ley del 'sólo sí es sí'.

No obstante, hay otra gran parte del movimiento feminista muy movilizada contra las políticas del Ministerio de Igualdad y están lanzando contantes campañas pidiendo el cese de Irene Montero que, por otra parte, es cuota de Unidas Podemos y, en principio, el cambio debería decidirlo este partido. Así, el movimiento Red indomitable ha lanzado una campaña en Twitter pidiendo a Sánchez el cese de la ministra.

No obstante, en las filas socialistas reina en silencio. En el Gobierno desde la marcha de Carmen Calvo no hay contrapeso a los posicionamientos de la ministra de Igualdad; y en el PSOE la responsable de Igualdad, Andrea Fernández, evita entrar en toda polémica.

Sobre el autor de esta publicación

Manuel Sánchez | Corresponsal Político

Manuel Sánchez (Cáceres, 1967) es periodista y escritor. Trabajó 22 años en el diario EL MUNDO, primero en información judicial y desde el año 2000 se especializó en información política sobre el PSOE y el Gobierno. Tras un año en eldiario.es, de 2014 a 2021 estuvo en el área política de Publico.es. Es autor de los libros: "Las noticias están en los bares" y "Yolanda Díaz, la dama roja".