El nuevo Gobierno de Sánchez más presidencial y débil, sin Calvo, Redondo, Ábalos y sin Iglesias

El presidente se queda con todo el poder sin ningún vicepresidente político de nivel como los eran Calvo, Iglesias y Redondo y con escaso talento

El nuevo Gobierno de Sánchez más presidencial y débil, sin Calvo, Redondo, Ábalos y sin Iglesias

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La montaña de la crisis del Gobierno ha parido un ratón. Y en contra de lo que se dice en Moncloa el nuevo Ejecutivo no es más político ni más PSOE que el Gobierno anterior. El nuevo Gabinete es más presidencialista y, en talento y protagonismo político, mucho más insignificante y liviano que el anterior. 

Y, ante la desaparición de Pablo Iglesias -que se fue meses atrás- y ahora con la marcha de Ivan Redondo, Carmen Calvo y José Luis Ábalos, deja a Sánchez en primer plano y a la intemperie. Y con todo el poder, tanto en el Gobierno como en el PSOE, pero sin un ‘número dos’ ni posible sucesor. 

No en vano el presidente Sánchez ha sacrificado, como si fueran autores de sus propios errores, a los que eran pesos pesados de su Gobierno, Calvo, Ábalos y Redondo después de haber aburrido a Iglesias. 

Con lo que liquida a los políticos ‘más políticos’ de su anterior Gabinete y los sustituye por la insignificancia en la política y en la gestión de los nuevos ministros que llegan. Y entre los que se quedan del PSOE y UP no aparece nadie con talento, peso específico y con notoriedad en los ámbitos políticos, económico, internacional ni judicial. Ni un solo nombre para destacar. 

Eso sí, ha sustituido a algunos independientes, como Arancha González Laya o Pedro Duque y ha tirado de partido para las nuevas carteras, entre ellos José Manuel Albares, tres alcaldesas --las de Puertollano, Gavá y Gandía-- y Óscar López.

Pedro Sánchez deja fuera del Ejecutivo a un total de siete ministros, de entre los que destacan la vicepresidenta primera, Carmen Calvo y el ministro de Transportes, José Luis Ábalos. Ambos han sido dos fieles escuderos durante todo el periplo de Pedro Sánchez, primero por la secretaría general del PSOE y después en la presidencia del Gobierno. Calvo y Ábalos mantuvieron su apoyo al jefe del Ejecutivo incluso cuando éste fue expulsado de la secretaría general y le acompañaron en su carrera para recuperar de nuevo el mando del partido.

Ahora, la vicepresidencia primera la asumirá Nadia Calviño, lo que según fuentes socialistas implica una apuesta de Sánchez por la ortodoxia económica. Aunque al correr puesto, la nueva vicepresidencia segunda será la actual vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz y la tercera, Teresa Ribera.

No obstante la estructura de Gobierno no se verá reducida ya que aunque sale Carmen Calvo, las competencias de Presidencia las asumirá el hasta ahora secretario general de Presidencia, Félix Bolaños, que asciende a ministro. Este último ha desempeñado su cargo con eficacia y discreción, cualidades premiadas ahora por Sánchez.

El puesto de Ábalos será ocupado por Raquel Sánchez, la alcaldesa de Gavá, un municipio barcelonés de 47.000 habitantes. Éstá ocupará la cartera de un Ministerio fuertemente inversor, sobre todo en materia de infraestructuras.

Junto a Calvo y Ábalos, sale también del Gobierno el hasta ahora considerado 'todopoderoso' jefe de gabinete de Sánchez, Iván Redondo, quien llegó con el presidente a la Moncloa en junio de 2018, tras la moción de censura y después de que éste prescindiera de Juan Manuel Serrano, que le había sido fiel desde su desembarco en Ferraz. Aunque posteriormente le compensó con la presidencia de Correos.

Redondo, que no cuenta con carnet del PSOE, ha sido el principal asesor de Sánchez y había ido acumulando poder durante estos tres años, diseñando la estrategia que ha llevado a cabo el Gobierno, pero también influyendo en las estrategias electorales del PSOE. No solo sumó a su cargo el Secretario del Consejo de Seguridad Nacional, sino que Sánchez le dió el mando de todos los departamentos que asisten al presidente.

Ahora su cargo será ocupado por Óscar López, que llegará proveniente de la presidencia de Paradores Nacionales, aunque es un hombre de partido, que ha ocupado cargos orgánicos como número dos de José Blanco en la época de Zapatero y como número tres del PSOE, con Alfredo Pérez Rubalcaba. Está por ver aún si Óscar López contará con todo el poder que tenía Iván Redondo o si las atribuciones de su cargo se ven rebajadas con la nueva remodelación.

Sánchez ha prescindido además del titular del Ministerio de Justicia, Juan Carlos Campo, después de la controvertida concesión de los indultos, cuyo departamento debió argumentar la concesión de la medida de gracia para nueve excargos del Govern que estaban en prisión. Una justificación complicada después del el revés del Tribunal Supremo que se opuso a la concesión de los indultos. Su puesto será ocupado por la actual presidenta del Senado, Pilar Llop, quien recientemente ha estado envuelta en polémica por anular una votación que el PSOE había perdido en el Senado, la bajada del IVA a las peluquerías al 10 por ciento.

La crisis con Marruecos también ha pasado factura a la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, quien será sustituida por el embajador de España en París, José Manuel Albares. Este fue asesor de Sánchez en materia internacional y cuando llegó al Gobierno le nombró consejero de Asuntos Internacionales, dentro Gabinete de la Presidencia del Gobierno. Desde enero de 2020 era embajador en París y ahora regresa a España para ocupar la cartera de Exteriores.

Los otros ministros que salen del Gobierno son la titular de Educación, Isabel Celaá; el de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes; y el de Ciencia e Innovación, Pedro Duque. La primera será sustituida por Pilar Alegría, hasta ahora delegada del Gobierno en Aragón, pero también con una larga trayectoria en el PSOE, donde formó parte de la Ejecutiva y ocupó cargos orgánicos con Rodríguez Zapatero.

A José Manuel Rodríguez Uribes le sustituirá Miquel Iceta, hasta ahora ministro de Política Territorial. Iceta fue nombrado hace tan solo unos meses al frente de Política Territorial y Función Pública, donde ha trabajado en los últimos meses para dar una salida a los interinos de la administración pública.

Ahora, parte de su Ministerio, la referida a Política Territorial pasa a manos de la hasta ahora alcaldesa de Puertollano, Isabel Rodríguez, quien también asumirá la Portavocía del Gobierno. La otra parte de este departamento, la referida a la Función Pública, pasa al Ministerio de Hacienda, que ocupa María Jesús Montero, quien también deja la Portavocía del Ejecutivo.

Y el Ministerio de Ciencia e Innovación pasará a manos de otra alcaldesa, la de Gandía, Diana Morant, que es ingeniera de Telecomunicaciones y trabajó en el sector privado en tareas de I+D+I antes de dedicarse a la política.

"Hoy empieza el Gobierno de la recuperación"

El presidente del Gobierno ha asegurado que con la remodelación que ha acometido en su gabinete "hoy comienza el Gobierno de la recuperación", integrado por "mujeres y hombres" cuya misión será superar "por completo" la "peor calamidad" vivida en décadas por la humanidad y por España. En su opinión, la superación de la pandemia y sus consecuencias abre también a los nuevos miembros del Ejecutivo una "oportunidad excepcional" para "poner en pie una España mejor", un mensaje con la que ha concluido la breve declaración con la que ha dado a conocer la nueva composición del Gobierno.

El presidente ha afirmado que la recuperación debe ser "más social, más verde, más digital y más feminista", y que sólo alcanzará sus metas si hay diálogo social y concordia territorial. Según ha remarcado Sánchez, la recuperación será "más social", de lo contrario habrá desigualdad, como ocurrió en la crisis de 2008; debe llegar a todos los estratos de la sociedad; debe ser digital y verde, "porque tras la crisis de la Covid-19 hay que evitar a toda costa una emergencia climática", y debe ser más feminista. En su opinión, la recuperación "alcanzará todas sus metas si hay diálogo social y concordia territorial".

Sánchez ha destacado además que la remodelación de su Gabinete supone un relevo generacional -reduce la edad media de sus ministros de 55 a 50 años- y la mayor presencia de mujeres, que pasan a ocupar el 63 % de las carteras, frente al 54 %.

Sánchez ha destacado que España vuelve a ser referente en igualdad de género y la incorporación de perfiles procedentes de la política municipal, durante su comparecencia en Moncloa, tras informar al Rey Felipe VI de la remodelación ministerial.

Los nuevos ministros del Gobierno de Sánchez jurarán o prometerán sus cargos ante el Rey el próximo lunes a las nueve de la mañana en el Palacio de la Zarzuela, según ha informado este sábado la Casa del Rey. Tanto los nuevos ministros, como los que se mantienen, celebrarán su primer Consejo de Ministros el próximo martes.

Yolanda Díaz consigue mantener las carteras de UP

Unidas Podemos ha logrado mantener, mediante la negociación encabezada por la vicepresidenta Yolanda Díaz, sus ministerios y conservar su cuota sin cambio de nombres en el Ejecutivo dentro de la amplia remodelación que acometió este sábado Sánchez.

Según detallan fuentes conocedoras de la negociación, la también titular de Trabajo ha negociado personalmente con Sánchez el alcance de la reestructuración durante esta semana y pidió específicamente como prioridad que no afectara a su espacio político, aspecto que ha conseguido. De esta forma, mantienen sus actuales carteras la propia Díaz, la ministra de Igualdad, Irene Montero, su homóloga en Derechos Sociales, Ione Belarra, y ministro de Universidades, Manuel Castells, y el titular de Consumo, Alberto Garzón.

Tras anunciar Sánchez los cambios, la propia Yolanda Díaz ha llamado a "pensar en grande" y ha sostenido que el Gobierno "sigue comprometido con los grandes retos del acuerdo de coalición".

La ratificación de los cinco ministros de Unidas Podemos se ha conocido después de que en las quinielas sobre la remodelación del Gobierno se incluyese con fuerza esta semana a Garzón, después de la desautorización de que fue objeto por Sánchez por su campaña para reducir el consumo de carne. "A mí, donde me pongan un chuletón al punto, eso es imbatible", señaló el presidente del Gobierno al ser preguntado por esa polémica.

Díaz, que asumió el liderazgo de Unidas Podemos tras la marcha del exvicepresidente Pablo Iglesias, ha logrado en el marco de la negociación que la amplia remodelación que acometió Sánchez no afecte a la representación del espacio confederal dentro del Ejecutivo, como le trasladó al propio Sánchez dentro de la negociación mantenida. Por tanto, ha logrado mantener la estabilidad dentro del espacio confederal y acotar el alcance de la remodelación al ala socialista de la coalición, un criterio que se defendía desde el socio minoritario del Ejecutivo.

Alberto Garzón detalló recientemente que Unidas Podemos no contemplaba una reducción de sus carteras en caso de que el presidente decidiera activar cambios en el Consejo de Ministros. Y es que el también coordinador de IU desgranó que una alteración de la estructura global del Gobierno entrañaba negociarlo con Unidas Podemos.

También se expresó en términos similares Belarra, al recalcar esta semana que el Ejecutivo está compuesto por dos formaciones diferentes y que cada una puede adoptar las decisiones que considere dentro de los ministerios que dirigen.

Así, aludía implícitamente al protocolo de funcionamiento y coordinación del acuerdo de coalición, que en su artículo 19 pauta que en caso de reestructuración del Ejecutivo, se mantendrá el número de áreas gestionadas por PSOE y Unidas Podemos y su peso relativo en el conjunto del Gobierno, en los términos acordados al inicio de la investidura.

"En caso de la reestructuración implique una alteración sustancial de lo acordado previamente, las partes volverán a abordar las cuestiones esenciales que se planteen en dicha reestructuración", desgrana este apartado. Es decir, que una remodelación que implicara, por ejemplo reducción de carteras, entrañaría hablar no solo de nombres sino también de competencias.

En el seno de Unidas Podemos entienden que era lo lógico que la remodelación afecte solo al área socialista, dado que cambios que implicaran remover sus ministerios implicarían una negociación complicada y de alto calado, que podría haber sido motivo de tensión.

Las otras crisis de Gobierno de Sánchez

Las elecciones generales del 10 de noviembre de 2019 permitieron el acuerdo entre el PSOE y Unidas Podemos para conformar el primer Ejecutivo de coalición de la actual etapa democrática y el más numeroso de este periodo, con 22 ministros.

Desde que se constituyó el Gobierno en enero de 2020, Sánchez ha acometido sólo dos cambios en su Ejecutivo, con reajuste mínimo. El primero llegó en enero de 2021, cuando el entonces ministro de Sanidad, Salvador Illa, dejó el Gobierno para presentarse a las elecciones catalanas. Le sustituyó en el cargo la entonces ministra de Política Territorial, Carolina Darias, y se incorporó al Ejecutivo, en la cartera que la canaria dejaba libre, el líder del PSC, Miquel Iceta.

Dos meses después, a mediados de marzo, el exlíder de Podemos Pablo Iglesias anunció que dejaba el Gobierno para ser candidato de su partido en las elecciones autonómicas anticipadas de la Comunidad de Madrid, y su decisión provocó la segunda remodelación, que solo afectó a las carteras de Unidas Podemos, pero alteró la estructura de las vicepresidencias.

En concreto, Iglesias fue sustituido en el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 por la hasta entonces secretaria de Estado de Agenda 2030, Ione Belarra. Y la entonces ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, asumió la vicepresidencia tercera y el liderazgo de los 'morados' dentro de la coalición. Así, ha sido ella la que ahora ha negociado con Sánchez que su amplia remodelación no afectara a las carteras de Unidas Podemos.

El primer Gobierno que formó el líder socialista, tras prosperar la moción de censura que presentó contra Mariano Rajoy en la XII legislatura, duró menos de una semana, desde el 7 al 12 de junio de 2018, ya que su primer ministro de Cultura y Deporte, Maxim Huerta, dimitió tras conocerse que defraudó a Hacienda 218.000 euros.

Huerta fue sustituido por José Guirao, y ese nuevo Gabinete fue modificado de nuevo casi tres meses después, el 11 de septiembre, tras el cese de Carmen Montón, sustituida por María Luisa Carcedo como ministra de Sanidad ante supuestas irregularidades en la obtención de un máster en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.

No hubo más modificaciones hasta el 20 de mayo de 2019, cuando el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, asumió el despacho ordinario de los asuntos del Ministerio de Política Territorial y Función Pública tras la renuncia de Meritxell Batet para optar a la presidencia del Congreso.

Todos los miembros de ese Gabinete siguieron en funciones ante la imposibilidad de una investidura en la XIII legislatura, donde sólo hubo un ausencia más a partir del 30 de noviembre de 2019 al abandonar el Gobierno el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, tras ser designado como Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Seguridad. Su cartera la asumió la ministra de Defensa, Margarita Robles. Ese fue el último Gobierno en solitario presidido por Sánchez antes del acuerdo que alumbró el actual de coalición PSOE-Podemos.