| EFE

Centrada Rusia en la destrucción de poblaciones en el oriente de Ucrania y decidido el presidente Biden a prestar más apoyos a Kiev, se definen los términos para la ampliación, también, de la ayuda de otros países de Occidente en la defensa frente a la campaña de Moscú, llevada a cabo en la fracción del occidente europeo más batida por esta Rusia putiniana. Así las cosas, se abre otro capítulo para las respuestas militares de Occidente frente a las amenazas activadas desde Moscú.

De tal modo, EE.UU. y las democracias occidentales se movilizan en pos de mayores apoyos a la causa de la defensa de la libertad y la soberanía del país ucraniano en el último disparo histórico del neosovietismo de Vladimir Putin.

De subrayar, en esta tesitura histórica, es la amplitud de registro que en Occidente ha precisado una respuesta que esté al nivel exigido por la barbarie y las atrocidades que se están llevando a cabo. Es decir, una unidad de acción internacional que luche por la bandera de Ucrania: símbolo, en estos días, de la libertad.