Las últimas encuestas electorales aparecidas esta mañana mantienen en su totalidad la victoria electoral del PP de Feijóo sobre el PSOE de Sánchez. Y todas ellas, salvo la del diario El País, garantizan a Feijóo mayoría absoluta del PP con Vox. Esta última reconoce la victoria de Feijóo y asegura un empate por bloques con el que ninguno de los dos podría gobernar, lo que resulta impensable que pueda ocurrir.
El último gran sondeo de Ipsos para El Confidencial le otorga al PP 136-139 escaños y al PSOE 104-106. Asimismo le concede a Vox la conquista del tercer puesto con 40-42 diputados frente a los 32-35 de Sumar, dejando claro que el bloque de la derecha puede gobernar en coalición con cerca de 180 diputados, 4 por encima de la mayoría absoluta.
NC Repot para La Razón da un resultado parecido con 148 diputados para el PP y 33 para Vox, mientras el PSOE se queda en 104 y Sumar 30.
Y situaciones parecidas ocurren con los ‘tracking’ de ABC de GAD3 que da al PP 151 escaños y al PSOE 114 promoviendo el bipartidismo, mientras que Vox queda en 30 diputados y Sumar en 26.
Es en este marco demoscópico de victoria generalizada de Feijóo en el que Sánchez se acerca hoy a un debate con Feijóo que el PSOE, confiado en la habilidad y agresividad de su pupilo, ha querido presentar como si fuera la mismísima noche electoral en el que solo compiten dos votantes Sánchez y Feijóo. Lo que no es verdad por mucho que se empeñen en La Moncloa.
Donde saben, como en la sede del PP de Génova 13, que el debate no va a cambiar de manera decisiva la intención de voto de los españoles y que, por lo tanto el PP ganará y gobernará.
Entre otras cosas porque la mejora del PSOE de las últimas semanas se hizo a costa de quitarle votos y escaños a Sumar a los que GAD3 ha dejado en 26 diputados, lo que constituiría un rotundo fracaso de Yolanda Díaz porque los partidos que representan sumaron 38 diputados en 2019, lo que puede significar que Sumar perdería un 30 % de los diputados que tuvieron hace ahora cuatro años Podemos, Más País y Compromís.
Asimismo todos los sondeos confirman un notable descenso en escaños de los partidos del nacionalismo catalán, ERC, JxC y CUP que en 2019 llegaron a sumar 23 diputados y que esta vez podrían quedarse en 17, lo que sería otro desastre añadido para la coalición Frankenstein.