Alberto Núñez Feijóo viajó el jueves a Badajoz para reclamar el apoyo al PP el próximo 28-M tanto de los votantes del PSOE decepcionados con los pactos de Pedro Sánchez, como de los seguidores de Vox, a los que ha avisado de que dividir el voto solo "beneficia a la izquierda". Un acto en el que el presidente del PP volvió a liarla tras equivocarse con el nombre de la comunidad en la que se encontraba al confundir Andalucía con Extremadura.
"Acabo con la palabra ilusión, porque eso es lo que percibo cada vez que vengo a Andalucía", proclamó Feijóo en el mitin junto a sus candidatos a la Junta de Extremadura y a la alcaldía de Badajoz, María Guardiola e Ignacio Grajera. Un lapsus que le valió un reproche de los asistentes al grito de "¡Eeeeh!".
Le ha costado un rato a Feijóo darse cuenta que no estaba en Andalucía sino en Extremadura. pic.twitter.com/jWfZPJQPcC
— Julián Macías Tovar (@JulianMaciasT) May 11, 2023
Tras seis segundos eternos, el líder del PP trata de salir del apuro con otra frase desafortunada: "Pero, ¿a que os habéis dado cuenta?". "Estaba yo pensando que llevo mucho tiempo hablando, ¿y a que no se han dado cuenta de lo que digo? Esa ilusión que he visto en la otra tierra es la que quiero aquí. ¿Sabéis por qué? Porque allí lo conseguimos y aquí también lo vamos a conseguir", aseguró, logrando entonces la ovación de los presentes.
"La única fórmula segura de que gobierne el PP es votar al PP, lo demás no es seguro", continuó Feijóo, tras pedir la confianza de "aquellos que querían sumar con el PP" y de los socialistas que "votaban al PSOE porque entendían que era un partido de estado y ahora ven que sus socios van contra el Estado".
Feijóo ha puesto a Badajoz como ejemplo de que se gana mucho volviendo a unir el centroderecha, pues Grajera es ahora candidato del PP tras haber sido alcalde de Ciudadanos y haber compartido el mandato con los populares. De Guardiola ha dicho que ganará al CIS para ser la primera presidenta de Extremadura.
Con Guardiola y Grajera y él como aspirante a presidente del Gobierno, Feijóo se ha comprometido a corregir el "agravio histórico de inversión" en Extremadura, a poner fin al "aislamiento de infraestructuras" y a llevar un "tren digno a la nación". Y ha bromeado con los extremos tras aludir por error a Andalucía diciendo que quiere lograr en esta región lo que consiguió Juanma Moreno.
Ha llamado además a derogar el sanchismo por un "sinfín" de razones que ha desgranado y que van desde las rebajas de penas a agresores sexuales o una política de vivienda que, a su juicio, va a subir precios.
También la falta de una política de agua, pues ha vuelto a acusar al Gobierno de "desidia" y de pretender "engatusar" a los agricultores con ayudas, al tiempo que ha advertido de que reducir la superficie de regadío es la "perdición" del campo.
De nuevo ha cargado contra los pactos con EH Bildu, que lleva en sus listas a 44 etarras, siete con delitos de sangre, en lo que es para Feijóo "un insulto a la democracia, a la policía, a la Guardia Civil, a las mil víctimas que han muerto por el terrorismo, a los heridos y a la dignidad" de España.
Al cambio ha llamado también María Guardiola, que ha comparado a su contrincante, el socialista Guillermo Fernández Vara, con un "vino picado" por contagiarse del populismo y le ha acusado de ser "cómplice" de los "delirios" de Sánchez.
El PP no renuncia a "ganar ambas elecciones", ha dicho por su parte el candidato a Badajoz, que ha advertido de que se enfrentan a un PSOE que ha "castigado a Badajoz por votar mal" y a "las malas copias de Pedro Sánchez" que "han dejado tirado a los vecinos".