Italia ingobernable, España sin gobierno
Las dos orillas del Mediterráneo están al rojo vivo. Al sur los nuevos regímenes de la primavera árabe no salen a flote en sus respectivos naufragios y al norte la Europa meridional de Grecia, Italia, España y Portugal permanece sumida en el desastre del paro, la crisis económica y la gran recesión, sin horizonte a corto o medio plazo que permita imaginar la recuperación. Más bien al contrario empieza a crecer la sospecha de que Merkel, el BCE y la Comisión Europea se han equivocado radicalmente con sus políticas de extremo ajuste del déficit.
Los últimos datos y previsiones de la Comisión Europea así lo avalan, y los problemas políticos de España e Italia también lo certifican. Los italianos tras unas elecciones en las que el gran pupilo de Merkel, Mario Monti, ha resultado ser el gran perdedor de unos comicios en los que en la Cámara de diputados ganó el centro izquierda de Bersani, mientras que en el Senado triunfó el inagotable Berlusconi en compañía de sus socios de la Liga del Norte, aunque caben otras alianzas de difícil estabilidad, con lo que Italia se despierta hoy como un país más bien ingobernable y con la sorpresa de que el partido anti sistema de Beppe Grillo, el “Movimiento cinco estrellas”, aparece como el gran triunfador de los comicios. Lo que, sumado a una resistencia a la baja de Berlusconi con su “Polo de la libertad”, hace que en Italia aflore una base social que se declara en contra del euro y a favor del regreso de la lira, lo que ha de preocupar y mucho en la UE por mas que el peligro no sea inminente.
En la capital de España el pasado sábado desfilaron (como en otras cincuenta ciudades del país) miles de personas protestando contra el paro, las políticas de ajustes y la corrupción. No fueron manifestaciones muy masivas pero sí importantes, sobre todo si se tiene en cuenta que carecían de organización previa y que no han sido convocadas por los partidos ni por los sindicatos. Los seguidores de la anti política o contra la clase política crecen en nuestro país aunque las elecciones aún están lejanas (para 2015). Y, al contrario de Italia, aquí sí tenemos un gobierno mayoritario del PP con el apoyo apoyo parlamentario en las dos Cámaras. Pero el Gobierno no anda, no camina, no funciona y carece de un importante liderazgo, por más que Rajoy le haya ganado el debate de la nación a un Rubalcaba que lleva sobre sus espaldas la pesada herencia de Zapatero.
El gobierno de Rajoy no es un buen gobierno, varios ministros están muy desgastados en solo un año, y el propio presidente Rajoy se ve acorralado y perseguido por el ‘caso Bárcenas’ de corrupción (que hoy inunda las portadas de todos los medios) y donde tiene una clara responsabilidad política, y ya se verá si también alguna judicial o penal (como presidente del PP).
Rajoy está, pues, parado y bloqueado y la Comisión Europea le acaba de echar un jarro de agua fría sobre sus resultados económicos de 2012 y sus previsiones para 2013, y además se enfrenta al desafío de la independencia catalana, frente a la que el presidente español no se ha atrevido a dar la cara. Y al deterioro de la imagen del Rey y de la Corona (ahora aumentado con las declaraciones de Corinna la presunta amante del monarca) , mientras se escuchan por Madrid voces a favor de la abdicación del Rey en el Príncipe Felipe, y se exige a la vez una reforma democrática en profundidad que obligaría a cambiar el texto de la Constitución. Y todo ello en medio de un festival casi inagotable de casos de corrupción.
Demasiados problemas políticos para Rajoy, quien no pasa de ser un aplicado y “obediente” -lo dice él- funcionario que aplica en España las duras recetas económicas que le envían desde Bruselas. Es cierto que este país ha reducido el ‘déficit estructural’ y ha recortado el gasto público, pero no consigue crear nuevas empresas ni empleo y el paro empieza a causar estragos imposibles de soportar.
Y para colmo ahí está la crisis institucional. Y lo que es peor, rotos los puentes de diálogo entre los grandes partidos nacionales (y el PSOE con mayores problemas de liderazgo que el PP y a su vez enfrentado en Cataluña con “su” PSC). Como en Italia, el panorama político y económico español es bastante malo porque en nuestro país hay desgobierno y en Italia un escenario de ingobernabilidad. Y ¿qué dicen de todo esto los mercados? Pues hoy se verá aunque de momento no se meten demasiado en política, sino más bien y sobre todo vigilan la cuenta de resultados. Pero si todo sigue así y crece la tensión o la revuelta social entonces los mercados atacarán. Sobre todo si la UE no empieza a cambiar el rumbo y a rectificar.
Da pena darse cuenta que actores que en los años de los 50 a los70 eran casi secundarios, hoy serian protagonistas absolutos.
Otro tanto con los guionistas, otro tanto con los directores.
Se murió el cine y reinan los cómica, en mi niñez tebeos.
Lástima.