Ana Botín, la presidenta del Banco Santander, ha eludido encarar la polémica suscitada por los comentarios efectuados por algunos representantes del Gobierno, como la vicepresidenta Yolanda Díaz y la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, de ver la posibilidad de topar las hipotecas de los más vulnerables tras los beneficios récord obtenidos en 2022 por las principales entidades financieras.
Ante el aluvión de preguntas recibidas sobre esta cuestión durante la rueda de prensa celebrada para analizar los resultados del Santander el pasado año, con esos 9.605 millones de euros de beneficio, Botín reiteraba una y otra vez que "la relación con el Gobierno es fluida, como debe ser, y trabajando juntos lograremos lo mejor para el país y para los accionistas".
España, de los más competitivos en hipotecas
En este sentido, y sin querer echar leña al fuego respecto a estas controversias con el Gobierno sobre los beneficios empresariales, sí quiso apuntar Ana Botín que “somos uno de los mercados más competitivos en hipotecas”.
Y lo justificaba con datos. Según la presidenta del Banco Santander, en diciembre de 2022 el interés medio de la hipoteca en España se situaba en el 2,91%, por debajo del 3,5% del interés del bono español, mientras que en Alemania ese precio del bono se situaba en el 2,5%, en tanto que el coste medio de las hipotecas subía hasta el 3,5%.
230 millones por el nuevo impuesto a la banca
Tampoco quiso dejar pasar la ocasión para cuantificar lo que le va a costar al banco costear el nuevo impuesto a la banca en 2023. “Serán entre 220 y 230 millones de euros”, que, dijo Botín, serán contabilizados al cierre del primer trimestre del presente ejercicio.
Y ya, para zanjar esta cuestión, señalaba la presidenta del Santander, que el banco asume una tasa efectiva de impuestos en España de en torno al 30%, aunque su impacto es mucho mayor pues “contribuimos, con cargas sociales y todo tipo de impuestos, con más del 50% sobre los beneficios, y superará el 60% con este nuevo impuesto”.
“Está bien que paguemos, pero que paguen todos”
Además, argumentaba Botín con cierta ironía, que “está muy bien que paguemos más impuestos, pero que paguen todos”, ya que “la banca ha estado perdiendo dinero durante muchos años, porque de las grandes cifras del grupo el 85% se genera fuera de España”, concluía Botín, que dejó en el aire la posibilidad de que el Santander recurra el nuevo impuesto.
La presencia anual de Ana Botín ante los medios para analizar los resultados del ejercicio 2022 servía también para introducir matices críticos respecto al modelos de transición energética y ecológica que el Gobierno pretende llevar a cabo.
Al respecto, comentaba que, a su juicio, “no se trata únicamente de financiar la innovación y las energías verdes, sino que hay que hacerlo también a empresas y pymes para que sean capaces de pasar de marrones a verdes, porque si esto se penaliza no conseguiremos nada”.
Una de las novedades de esta convocatoria de prensa ha sido la puesta de largo en estas lides del mexicano Héctor Grisi como nuevo consejero delegado del Banco Santander, en sustitución de José Antonio Álvarez, quien permaneció en el cargo durante ocho. Recordaba Ana Botín que lo primero que le dijo a su nuevo ‘número dos’ cuando aceptó el cargo es que “operase y ejecutase”, como lo había hecho durante años como responsable de la filial Santander México.