¿Sabes cuánto dinero gastas al mes en comida?
De acuerdo con un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) el desembolso medio en alimentación de una familia española es de unos 4.000 euros al año.
De esta cantidad, un 30 % se destina a comer fuera de casa, ya sea en restaurantes, bares o cafeterías. Esto significa unos 1.200 euros, lo que supone 100 euros al mes o unos 3 euros al día.
La cifra no solo afecta tu bolsillo, sino también tu salud y al medioambiente porque implica consumir alimentos más grasos, salados y procesados que provocan problemas como el sobrepeso, la hipertensión o el colesterol.
Le sumamos la generación de desperdicio y más emisiones de gases de efecto invernadero, que contribuyen al cambio climático.
¿Qué puedes hacer para economizar dinero y comida en tu día a día? La respuesta es sencilla: cocinar en casa.
En este artículo te vamos a explicar algunos consejos e ideas para lograrlo.
¿Te animas a probarlos?
¿Cuánto se ahorra cocinando en casa?
¿Alguna vez te has preguntado cuánto ahorras si cocinas en casa?
Bien, estás a punto de descubrirlo y te garantizamos que los números te sorprenderán:
Para hacer los cálculos solo aplica una fórmula sencilla:
- Ahorro = (Precio medio de comer fuera - Precio medio de cocinar en casa) x Número de veces que comes fuera.
El precio medio depende del tipo de establecimiento y del menú que elijas, pero toma como referencia unos 10 euros por persona.
Sobre el precio medio de cocinar en casa depende de los ingredientes que uses y de las cantidades que preparas, así que estima unos 3 euros por persona.
El número de veces que comes está vinculado a los hábitos y disponibilidad, así que supone 3 oportunidades por semana.
Con estos datos, vamos a hacer el cálculo:
- Ahorro = (10 - 3) x 3 x 4 = 84 euros al mes.
Esto significa que si dejas de comer fuera 3 veces por semana y cocinas en casa, ahorras unos 84 euros mensuales o lo que es igual 1.008 euros al año.
¿Cómo economizar en la comida?
Todos sabemos que el gasto en alimentos es una parte esencial de nuestras vidas, pero ¿qué tal si te decimos que hay formas inteligentes de reducir esos gastos sin sacrificar la calidad de tus comidas?
Lo primero que debes saber es que el ahorro empieza desde el momento en que haces la compra. Por eso, es importante que sigas estos pasos:
- Antes de ir al supermercado o al mercado, revisa lo que tienes en la nevera o en la despensa y anota lo que necesitas adquirir.
- No te dejes tentar por las ofertas o los productos que no están en tu lista. A veces compramos más de lo que podemos consumir y terminamos tirando comida a la basura.
- Compra productos locales y de temporada, ya que suelen ser más baratos, más frescos y más ecológicos.
- No todos los establecimientos tienen los mismos precios ni ofertas. Puedes ahorrar dinero buscando las mejores opciones y aprovechando los descuentos o las promociones.
Una vez que tengas los alimentos en casa, debes conservarlos adecuadamente para que duren más tiempo y no se estropeen:
- Mantén el orden en la nevera y el congelador. Coloca los alimentos según su temperatura óptima y su fecha de caducidad o de consumo preferente.
- Presta atención a los recipientes en los que guardas los alimentos, ya que deben cerrar bien y ser transparentes o etiquetados para ver lo que hay dentro.
Trucos para gastar menos en la cesta de la compra
Seguimos mencionando algunos estudios de la OCU sobre el tema. Uno de ellos, asegura que el ahorro anual al comprar en el supermercado más barato puede oscilar entre 247 y más de 3.000 euros, dependiendo de la localidad.
Por eso, te recomendamos que compares los precios de los establecimientos cercanos a tu zona y que elijas el que tenga un mejor nivel.
Otro consejo efectivo es apostar por las marcas blancas (son productos que se venden bajo el sello del distribuidor o minorista, en lugar de llevar el del fabricante original).
Al respecto, otro estudio señala que el ahorro anual al comprar solo productos de marca blanca puede ser de entre el 35 % y el 45 % o cerca de 2.500 euros al año.
Un tercer truco muy sencillo es no ir al supermercado con hambre, comparar el precio por kilo o unidad, aprovechar tu despensa, comprar a granel o usar las tarjetas de fidelización.
Otra opción es reducir los comestibles altamente procesados porque a menudo son más costosos y menos saludables. Opta por ingredientes naturales tanto como puedas.
Y ojo, utiliza aplicaciones móviles o herramientas en línea para realizar un seguimiento de tus gastos en comestibles. Esto te ayudará a identificar áreas donde puedes optimizar tu presupuesto.
Ingredientes baratos para ahorrar dinero
Cuando se trata de ahorrar dinero en la cocina, elegir ingredientes económicos es un movimiento inteligente.
La buena noticia es que no tienes que sacrificar el sabor o la calidad de tus comidas para mantener tu bolsillo bajo control.
Por eso, aquí te presentamos una lista de ingredientes amigables que pueden transformar tus platos sin dejar de ser deliciosos:
- Las lentejas, garbanzos y otras legumbres son auténticas joyas cuando se trata de economizar en tus comidas. Son una excelente fuente de proteína vegetal y se pueden emplear en una variedad infinita de platos, desde sopas y guisos hasta ensaladas y hamburguesas vegetarianas.
- El arroz es un ingrediente versátil que rinde mucho y es económico. Ya sea blanco, integral o de cualquier variedad, es una base perfecta para platos como paellas, risottos, bowls y mucho más.
- La pasta es un salvavidas para tu billetera. Con una amplia gama de formas y tamaños creas una variedad infinita de platos con ingredientes simples como tomates, aceite de oliva, ajo y hierbas.
- Los vegetales de temporada suelen ser más baratos y están en su punto máximo de frescura. Comprarlos te permite variar tu dieta, experimentar con nuevos sabores y ahorrar dinero.
- Los huevos son una fuente económica de proteína. Pueden ser protagonistas de desayunos, almuerzos o cenas y prepararlos de innumerables maneras, desde revueltos hasta tortillas.
- El pollo es una excelente opción de carne asequible. Tienes la opción de comprarlo entero o en piezas y se adapta a recetas de todo tipo.
- La avena es un desayuno accesible y saludable. Cocínala como cereal caliente, mezclarla con yogurt o utilizarla en batidos.
- Las patatas son una magnífica fuente de carbohidratos económicos. Puedes hacerlas al horno, en puré o fritas.
- El atún enlatado es una proteína de alta calidad. Puedes usarlo en ensaladas, sándwiches o pastas y es muy conveniente para preparar comidas rápidas.
Llegamos al final.
Recuerda que cocinar en casa no solo te permitirá ahorrar dinero, sino que también te brindará un mayor control sobre tus alimentos y la oportunidad de experimentar con nuevas recetas o sabores.
Así que, anímate a poner en práctica lo que has aprendido. Tu bolsillo, tu salud y tu paladar te lo agradecerán.