Apocalípticos y Analfabetos
Umberto Eco escribió un ensayo titulado “Apocalípticos e Integrados” donde situaba a quienes querían traer la revolución total: maoístas, hippies, anarcos como apocalípticos y a los conservadores como integrados. La decadencia de occidente ha llegado a tales niveles de descomposición que los conservadores se han vuelto apocalípticos por cobardes. Se detectan unas radiaciones en Japón y el comisario europeo Günther Oettinger describe la emergencia nuclear en Japón como “el apocalipsis” y advierte que su solución “está en manos de Dios”. Luego con típica flexibilidad prusiana, al ser apostrofado por diversos países, insiste en que no se arrepiente de lo que dijo.
Si alguien estudia física nuclear -que, por cierto, es el caso de quien esto escribe- sabe que las radiaciones tienen un campo de acción limitado, no infinito. Por eso se desalojaron 30 km alrededor de los reactores y no 300 kilómetros. Y si alguien que no ha estudiado física nuclear tiene sentido común, será capaz de relacionar las centrales nucleares con la bomba atómica y recordar que cuando cayó la bomba en Hiroshima la radiación no llegó a Tokio: destruyó los 30 kilómetros circundantes.
Una central atómica usa el mismo proceso que la bomba, pero controlando la fusión para que la energía salga dosificada y paulatinamente. Una bomba es una central descontrolada y una central una bomba controlada.
Por ahora la única catástrofe fue el tsunami que puede haber causado 20.000 muertos. Por la radiación pueden quizás morir los héroes que están en la central intentando enfriar los reactores. Como héroes son el pueblo japonés por el comportamiento sobrio, elegante, realista que están mostrando ante la adversidad, tan lejos de las histerias habituales aquí en Europa en cuanto algo va mal. Allí no culpan al gobierno de que el tsunami destroce las centrales ni le acusan de gestionarlo mal. No reaccionan como histéricos mal criados ni como cínicos oportunistas políticos. Se mantienen en un dignificado silencio.
¿No querían saber por qué el siglo XXI va a ser de Asia? pues ahí tienen una muestra. La otra es el modo como trabajan los chinos, cosa para mí nada encomiable, pero igual de fiable para diagnosticar la hegemonía asiática en el siglo que comenzamos. Y menos mal que los tsunamis son allí, aquí sólo nos faltaría una de estas para acabar de ponernos en ridículo.