Luis Rubiales levantó al menos a otras cuatro jugadoras y las besó de forma efusiva durante la ceremonia de entrega de medallas del Mundial Femenino de Fútbol celebrado en Australia y Nueva Zelanda. En las imágenes de RTVE se ve de forma clara cómo el entones presidente de la Federación Española de Fútbol -ahora suspendido- levanta a Teresa Abelleira, Athenea del Castillo, Oihane Hernández e Irene Guerrero.
La secuencia es clara y no deja lugar a dudas. A todas las jugadoras, además, las besa en el rostro, incluso parece que en el cuello, de forma efusiva y con insistencia.
El 20 de agosto la selección femenina ganó la final del Mundial de Fútbol a Inglaterra (1-0) con gol de Olga Carmona. El éxito ha quedado empañado por el comportamiento de Rubiales tanto en el palco como en la ceremonia de entrega de medallas. Un comportamiento que, por ahora, ha motivado una suspensión temporal por parte de la FIFA -90 días sin poder tener vínculo alguno con el mundo del fútbol nacional e internacional-, la acción del Consejo Superior de Deportes, que ha elevado una denuncia al TAD (Tribunal Administrativo del Deporte), y la apertura de diligencias por un presunto delito sexual por parte de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
Rubiales se tocó de forma ostensible los genitales tras el triunfo de la selección. En el palco, junto a las autoridades, entre ellas la reina Letizia y la infanta Sofía, el presidente suspendido de la RFEF, eufórico, hace gestos ostensibles hasta terminar por agarrarse "esa parte del cuerpo", como él mismo dijo el viernes pasado en la Asamblea de la Federación en la que anunció que no pensaba dimitir.
Los besos de Rubiales
Después, en el terreno de juego, junto al presidente de la FIFA, Infantino, y la Reina y la Infanta, Rubiales abraza y besa a todas las jugadoras. A una de ellas, Jennie Hermoso, le da un beso en la boca, lo que ha desatado una reacción unánime de condena tanto en España como en el resto del mundo. Hasta el punto de que el debate ha llegado ya a la ONU. En el vestuario la jugadora dijo que no le había gustado y dejó claro que ella no podía hacer nada.
Rubiales dice que el beso fue consentido y que fue la jugadora quien lo levantó. Las imágenes se han analizado desde casi todos los ángulos. El equipo de comunicación del todavía presidente, que comanda Pablo García-Cuervo, remitió la semana pasada un comunicado con cuatro fotos en el que se trataba de demostrar la tesis de Rubiales.
Un nuevo vídeo que trascendió ayer parece dejar claro que es Rubiales quien se cuelga de la jugadora, que incluso se llega a poner de puntillas para no perder el equilibrio.
La secuencia completa de la ceremonia de entrega de medallas a las campeonas del mundo no deja lugar a dudas de que el presidente levantó al menos a cuatro jugadoras: Abelleira, Del Castillo, Hernández y Guerero.
A todas las jugadoras las besa de forma efusiva, incluso en repetidas ocasiones. En algunos casos las imágenes muestran que algunos de esos parecen ser entre la barbilla y el cuello de las mujeres de la selección.