Nadal llega a la final en Australia y se cita el domingo con la historia
El español vence a Berrettini (6-3, 6-2, 3-6 y 6-3) y buscará su 21º grande ante Medvedev, que ha derrotado a Tsitsipas en cuatro sets
El español Rafa Nadal ha derrotado al italiano Matteo Berrettini por 6-3, 6-2, 3-6 y 6-3 y se ha clasificado para la final del Abierto de Australia, que será la sexta final que dispute en el Grand Slam que tiene lugar en Melbourne (ganó sólo una de las cinco anteriores) y su vigésimo novena final de los 'cuatro grandes'. A las 9.30 horas del domingo, el balear tendrá la oportunidad de hacer historia conquistando su vigésimo primer título de Grand Slam. Este viernes, el español encarriló el partido al adjudicarse las dos primeras mangas castigando el golpe más débil de Berrettini, su revés. El italiano con nada que perder, arriesgó en una tercera manga que se terminó apuntando. Y en un cuarto set igualado, el español estuvo más acertado en los momentos claves.
Las noticias que llegaron en las horas previas no parecían buenas para el balear. La lluvia que caía sobre Melbourne obligaba a que el partido se disputara bajo techo. Nadal seguía siendo favorito pero lo era un poco menos. El juego de Nadal, que con su liftado hace que bote mucho la pelota, se vería mermado ante un tenista, que, mejor sacador, también se veía favorecido al servicio.
El español contaba a su favor, además de con su experiencia, con el hecho de acumular menos horas en pista que el 'gigante' italiano, de 1,96 metros de altura y 25 años. Y en beneficio de ambos estaba que no tendrían que soportar el calor de días precedentes, al jugar incluso con un aire acondicionado que obligaba al público a vestir manga larga.
Nadal aspiraba a llegar a su sexta final en Melbourne. Berrettini buscaba clasificarse para su segunda final después de caer ante Djokovic en la final de Wimbledon de 2021.
Castigar el revés de Berrettini
Dos de las claves del partido estaban claras. Por un lado, el nivel que Berrettini daría con su revés, su golpe más vulnerable, y el daño que le haría el español cargando en esa dirección sus golpes. Y por el otro las dificultades que podría atravesar el balear al resto si el transalpino estaba acertado con su saque.
Esas dos claves fueron las que hicieron que Nadal se pusiera con un 2-0 a favor en el primer set en un abrir y cerrar de ojos. Sufrió para abrir el partido con su servicio pero lo consiguió. Y aprovechó los fallos en el primer servicio del italiano para llevar la iniciativa de los puntos castigando con su derecha el revés del italiano, que incurrió en varios errores consecutivos. Así puso el 2-0 y defendió sin apuros su segundo turno al saque.
Cuando el español concretó el 4-1, registraba tan sólo 2 errores no forzados por 11 del italiano. Sin conceder más opciones de break uno y otro, aunque a la cuarta bola de set, el 6-3 se completó en 43 minutos. El español había sacado petróleo del revés del italiano, quien en los últimos juegos había mejorado su efectividad y su velocidad en el saque pero volvió a ceder el servicio a las primeras de cambio, esta vez en el segundo parcial.
Segundo set muy cómodo
Al Revés, al revés y al revés. La derecha cruzada de Nadal era un martillo pilón que castigaba el revés del romano, que cuando disponía de una derecha no la convertía en ganadora y que al revés terminaba sin llegar a alguna derecha del español o estrellando la pelota en la red.
El español dominaba los puntos, que caían de su lado por el fallo del rival o indistintamente, tanto abriendo ángulos al revés de su rival con un golpe potente o cambiándole a la derecha con un golpe inalcanzable. Así, tras un nuevo break se puso el balear 3-0 ante un rival desesperado que miraba una y otra vez a su box tratando de encontrar soluciones. No variaba la tónica y el español se disparó en el marcador. El 6-2 final fue reflejo de un segundo parcial incluso más plácido que el primero. En dos sets Berrettini no había llegado a tener una sola opción de romper el saque.
Sólo una vez en su carrera, en Wimbledon en 2018 contra Sock, había remontado Berrettini dos sets. Esta vez parecía altamente improbable. No era cuestión sólo del resultado, sino de las sensaciones. Si Nadal, zurdo e infalible con la derecha, castiga a los jugadores que tienen un revés débil, esa hoja de ruta se estaba cumpliendo a la perfección.
Berrettini reacciona y acorta distancias
Y el italiano, cabe destacar que sin un mal gesto o sin romper ninguna raqueta, parecía anímicamente muy tocado aunque tras firmar el 2-1 y mantener sus dos primeros servicios, se desahogó con un grito tratando de animarse. Mandaba en un parcial por primera vez en el encuentro pese a seguir sufriendo con sus saques.
Con 4-3,dos errores de Nadal y un gran punto de Berrettini con un golpe en carrera pusieron al italiano con 0-40. Eran sus primeras oportunidades de break en todo el partido, tres de golpe y le acercaban a ganar el tercer parcial. Aprovechó la segunda y se situó con 5-3 y saque a favor, que ejecutaría con bolas nuevas. Con su mejor versión al saque, cerraba el tercer set con un juego en blanco. Al principio del set había sobrevivido y con el paso de los juegos había ganado en confianza hasta aprovechar el pequeño bajón en el juego del español, que había cometido algún error no forzado y había bajado la velocidad de sus golpes.
Nadal, más certero en los momentos decisivos
En el estreno de la cuarta manga, Nadal supo frenar el empuje y la euforia del romano, que llegó a disponer de un 15-30 en el primer juego. En los primeros juegos, esta vez fue el mallorquín el que supo sobrevivir con su saque. Aunque tenía que hacer frente a golpes muy potentes de italiano, que encadenaba juegos en blanco con su servicio, el español crecía con su saque aumentando el porcentaje de primeros y la velocidad de éstos.
Con 3-3, volvió a repetirse la historia. Nuevo 15-30 para el transalpino y de nuevo, el saque al rescate del español. En el juego siguiente, Nadal tuvo la primera ocasión de rotura de la cuarta manga y tras un peloteo largo, Berrettini salvó la tesitura a la primera. Pero a la segunda, Nadal demostró que en los puntos claves se crece. El español, con dificultades, se situaba con 5-3 a su favor. Y pese a iniciar con doble falta el juego final, cerró con cuatro puntos consecutivos su pase a la final del domingo.