La industria cinematográfica de Hollywood se tambalea. El Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión (SAG-AFTRA), que agrupa a los actores y presentadores de cine, radio y televisión de Hollywood, ha dado un paso al frente y ha decidido que irá a la huelga si no obtiene un nuevo convenio con los estudios antes del 30 de junio. Sus reivindicaciones son similares a las del Sindicato de Guionistas (WGA), que llevan más de un mes en huelga.
La decisión del SAG-AFTRA fue ratificada por el 98% de los votos, según ha informado este lunes Los Angeles Times, y se espera que las conversaciones con los estudios comiencen el miércoles.
El resultado no supone el inicio de la huelga en sí, pero permite que los principales negociadores del sindicato convoquen un paro una vez que sus contratos de cine o televisión hayan expirado el próximo 30 de junio si las negociaciones con la Alianza de Productores de Cine y Televisión fracasan.
En este referéndum votaron 65.000 miembros del gremio de actores, lo que supone una participación de casi el 48%, que es relativamente alta para tratarse de un sindicato en expansión. Para entender el impacto de esta cifra, la participación en la votación de ratificación de contratos de televisión y cine en 2020 fue de poco más del 27%.
Los actores, muchos de los cuales han mostrado su apoyo a los guionistas en su pugna con los grandes estudios, piden también una mejora de los salarios y de sus condiciones laborales, que consideran que no se han ajustado lo suficiente a la inflación y a las disrupciones del 'streaming'.
También existen preocupaciones por el uso de imágenes generadas con inteligencia artificial (IA) y la gestión de derechos de voz e imagen. Además, buscan fortalecer el plan de salud y de pensiones y restringir las audiciones autograbadas, cuya prevalencia aumentó durante la pandemia de coronavirus.
Sexta semana de la huelga de guionistas
La huelga de guionistas cumple esta semana su sexta de huelga sin fecha para reanudar las negociaciones con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP) para un nuevo convenio colectivo. El paro, de continuar, podría afectar a 600 producciones y provocar pérdidas económicas mayores de las que causó el de 2007, que alcanzaron los 2.000 millones de dólares.
El diálogo entre la WGA y la AMPTP para la renovación del convenio del sector terminó el 1 de mayo sin un acuerdo, lo que llevó a los más de 10.000 guionistas afiliados a iniciar el día 2 de ese mes esta huelga que ya desde su inicio avisó el parón paulatino de producciones de cine y televisión.
Las repercusiones en Hollywood fueron inmediatas, y programas de televisión semanales como Jimmy Kimmel Live! o The Tonight Show Starring Jimmy Fallon frenaron la realización de nuevos capítulos.
Poco tiempo después, series de la talla de Stranger Things, The Last of Us y Andor también anunciaron que pararían sus producciones. Hasta el momento más de 50 proyectos se han visto afectados por la huelga.
La intención de los guionistas es obstaculizar el avance del mayor número de producciones posibles hasta "vaciar la tubería de contenidos" y para lograrlo han ido cambiando sus estrategias organizando piquetes masivos fuera de los rodajes en Los Ángeles, Chicago y Nueva York.
Además, a diferencia de la última huelga, que se prolongó por 100 días, en esta los guionistas cuentan con el apoyo de otros sindicatos como el de directores, el de actores e incluso el de los conductores de camiones, lo que ha ejercido mayor presión a las empresas.
Es probable que este año el público solo vea reflejadas las consecuencias de la huelga en el ámbito televisivo, aunque la temporada de premios de Hollywood se verá mermada al no contar con el apoyo de los escritores en sus campañas promocionales ni su presencia en las entregas.
Hasta el momento, los Daytime Emmy ya pospusieron su fecha por el conflicto y premios con menos repercusión, como los MTV TV & Movie Awards, se vieron obligados a cancelar la ceremonia presencial por la amenaza de manifestaciones y la deserción de algunos presentadores en apoyo a los guionistas.
Pero las consecuencias ya han llegado a algunas producciones de cine de franquicias con récords taquilleros como la saga de Spider-Man protagonizada por Tom Holland. El actor ya anunciado que las reuniones para la cuarta película se habían interrumpido indefinidamente "en solidaridad" con los guionistas.