Si quieres bajar de peso, hay algunas cosas que debes tener claras. Lo primero es que las dietas milagro no funcionan. Son planes de alimentación muy restrictivos que ponen en riesgo tu salud. Además, no son sostenibles a largo plazo, de forma que cuando recuperas tu alimentación habitual, vuelves a ganar los kilos que has perdido, e incluso alguno más.
Tal y como explican los nutricionistas y expertos en salud, lo más recomendable es adquirir buenos hábitos que puedas mantener en el tiempo. Pues bien, dentro de estos hábitos, uno de los más importantes es el de eliminar determinados alimentos de la dieta. Son alimentos que no tienen ningún tipo de beneficio a nivel nutricional, y que, además, contribuyen al aumento de peso.
¿Qué alimentos no son buenos para adelgazar?
El azúcar blanco es un alimento completamente desaconsejado porque simplemente aporta calorías de fácil asimilación e hidratos simples. Se puede reemplazar por otros alimentos que endulzan de forma natural, como la miel. Aún así, lo más aconsejable es reducir el nivel de dulzor y adaptar poco a poco el paladar a una dieta sin apenas azúcar.
Aunque las patatas fritas son un aperitivo muy común, no deben formar parte de tu dieta si quieres adelgazar y cuidar tu salud. no sacian y tienen un efecto en el organismo muy similar al de las drogas, razón por la cual es casi imposible comer una sola patata frita. Además, en muchos casos contienen acrilamida, una sustancia tóxica.
Los rebozados comerciales debes sustituirlos por empanados en casa con ingredientes de calidad. La razón es que los rebozados contienen una gran cantidad de aceite y harinas refinadas, entre otros ingredientes, como saborizantes y almidones. Son uno de los alimentos que deben desaparecer de tu dieta.
Los embutidos forman parte de las canes procesadas, así que tienen un contenido más elevado de sal, azúcares y grasas. En una dieta saludable, debes evitar las salchichas, los chorizos y alimentos similares. Puedes sustituirlos por canes frescas con un bajo contenido graso, como la pechuga de pavo o de pollo.
Para mantener el cuerpo bien hidratado, lo mejor es el agua. Los refrescos tienen grandes cantidades de azúcar y sólo aportan calorías vacías a la dieta. Además, según han revelado algunos estudios, poseen sustancias con efecto adictivo en el organismo, como la cafeína y derivados. Reemplaza los refrescos por agua y otras bebidas naturales, como las infusiones.
La gran mayoría de helados comerciales tienen una cantidad de azúcares añadidos y grasas demasiado elevada. Además, no sacian, sino que incentivan a comer más y más. En este caso, la solución es muy sencilla: elabora tus propios helados caseros con leche y frutas. Procura que no tengan azúcares para que sean más saludables.
La pizza lista pata consumir o congelada se elabora con harinas refinadas y variedad de productos grasos como quesos curados y semicurados, fiambres, embutidos... Si quieres comer una buena pizza, hazla en casa con vegetales, cereales integrales, hortalizas y otros ingredientes de calidad.
Los snacks salados, sobre todo si son fritos, son muy perjudiciales para la salud. También son fuente de harinas refinadas y pueden esconder azúcar en su composición. Sustitúyelos por snacks caseros, como chips de verduras y frutas.
Los cereales de desayuno son ultraprocesados con mucho azúcar y sal, así como aceite de palma y grasas trans. Al contrario de lo que anuncian muchas marcas, no aportan nutrientes beneficiosos al organismo, así que debes limitar su consumo al máximo. Para desayunar, puedes sustituirlos por cereales naturales e integrales, como la avena o la quinoa.
Por supuesto, las chucherías no deben formar parte de una alimentación saludable y equilibrada. Sólo aportan calorías vacías y no sacian ni aporta n buenos nutrientes. En este grupo se encuentran muchos alimentos como caramelos y gominolas. Para tomar a modo de snack, puedes elegir frutos rojos o frutos secos.
Como puedes comprobar, son muchos los alimentos que debes eliminar de la dieta para tener una buena salud y perder peso. Recuerda lo importante que es adquirir hábitos de alimentación saludables y elegir siempre alimentos de calidad y con un buen valor nutricional. Debes hacer cinco comidas al día para cuidar el organismo y tener sensación de saciedad. Siguiendo estos consejos, conseguirás adelgazar.