El vasco Miguel de Unamuno fue un intelectual con mayúsculas. Cercano a la Generación del Noventa y ocho por su espíritu regeneracionista, su admiración por el paisaje castellano y sus inquietudes existenciales, nos ha legado magníficas novelas como 'San Manuel Bueno, mártir', 'La tía Tula', 'Niebla' o 'Paz en la guerra'. También poesías -todo hay que decirlo- de no excelente calidad y ensayos como 'Vida de don Quijote y Sancho' o 'Del sentimiento trágico de la vida'.
Pero también fue Unamuno un constante polemista de recio carácter. Su oposición a la Dictadura de Primo de Rivera provocó su destierro a Fuerteventura en 1924 y ahora esa isla canaria se dispone a conmemorar el nonagésimo aniversario de su estancia.
Lo que es menos conocido es que el autor de 'Abel Sánchez' era también un buen dibujante y los majoreros están organizando una exposición con los bocetos y retratos que realizó mientras permaneció desterrado. Todos ellos se encuentran en la Casa Museo Unamuno de Salamanca y serán enviados a Fuerteventura en noviembre. La muestra incluirá desde reproducciones de la flora y la fauna de la isla hasta paisajes y autorretratos. Todos ellos, unos doscientos, podrán verse en el Centro de Arte Juan Ismael.
Pero no será ésta la única actividad que se llevará a cabo para conmemorar la estancia de Unamuno en Fuerteventura. De hecho, los actos comenzarán el día diecinueve de este mes con una conferencia a cargo de Andrés Trapiello, experto en la obra del vasco. También habrá un concurso literario de novela corta bautizado con el nombre del escritor y otro certamen destinado a los escolares de la isla. Así mismo, se reeditarán 'De Fuerteventura a París', el diario que Unamuno escribió durante su destierro, del cual, además, se escenificarán algunos pasajes, y los artículos periodísticos que envió desde Canarias a diversos periódicos.
Vía: Noticias Yahoo.
Foto: José Mesa.