Miles de aficionados sevillistas se concentraron en los aledaños del Ramón Sánchez Pizjuán para celebrar la consecución de la quinta Copa del Rey del Sevilla en su historia y seguir a la comitiva de jugadores que paseó el trofeo por las calles de la ciudad.
El autobús descapotable en el que viajaron los jugadores, y que ha salido con más de media hora de retraso sobre el horario previsto, primero puso rumbo a la Santa Iglesia Catedral, donde la plantilla ofreció el título copero a la Virgen de los Reyes.
Tras el acto, la expedición partió hacia el Ayuntamiento de Sevilla, donde mostró el título a la afición, que ha teñido de rojo y blanco el centro de la capital hispalense.
Después de las sucesivas intervenciones en el balcón del Consistorio hispalense, el equipo regresó en el autobús descapotable hasta el Ramón Sánchez Pizjuán, donde terminó la fiesta.